viernes, 19 de diciembre de 2008

Condenan a una profesora por llamar a sus alumnos "analfabetos", "deficientes" y "gilipollas

La Audiencia Provincial de Granada ha confirmado la condena como autora de una falta de injurias a una profesora que en una reunión informativa de inicio de curso de un colegio llamó a los padres y a sus hijos "analfabetos", "incultos" o "deficientes".
Noticia publicada el 18-12-2008
L D (EFE) La Sección Segunda de la Audiencia, según la sentencia a la que ha tenido acceso Efe, ha estimado en parte el recurso de apelación que presentó la maestra contra el fallo dictado en primera instancia por un Juzgado de Baza que la condenó además como autora de otra falta de vejaciones.
La Audiencia revoca así parcialmente dicha resolución y deja sin efecto la condena impuesta a Marisol B.M. por las vejaciones, aunque sí mantiene que es autora de una falta de injurias, por la que se le ha impuesto la pena de 15 días de multa con una cuota diaria de 7 euros (unos 105 euros).
De acuerdo con el relato de hechos ahora confirmado, lo ocurrido se remonta al pasado 8 de octubre de 2007, cuando Marisol B.M., profesora y tutora de los hijos de las denunciantes, de segundo de Primaria del Colegio Santo Ángel de Zújar, Granada, profirió insultos a los padres y alumnos en la reunión informativa de inicio de curso.
En concreto, recoge la resolución, les llamó "maleducados, indisciplinados, analfabetos, incultos, deficientes, disléxicos y disgráficos", entre otros improperios.En el mencionado encuentro habló además de "lo tercermundistas que eran, de las malas condiciones que existen en los centros educativos y lo bien que estaban en épocas de Franco".
En su sentencia, la Audiencia confirma la condena de la profesora como autora de una falta de injurias leves "por las palabras ofensivas, dada su carga insultante, con que se dirigió a la concurrencia en aquella reunión", aunque ve injustificado el reproche penal que se le hizo por una segunda falta de vejaciones.
Al respecto, la Sala considera que la juez de Baza no explicó "suficientemente" la supuesta conducta posterior a la reunión que observaría la maestra con sus alumnos, al entender que la declaración de las madres en el juicio "no tiene otro valor que el de una prueba de referencia" al limitarse a exponer lo que sus hijos u otros alumnos les contaron acerca del trato de la profesora.
La Sección Segunda suprime parte del relato de hechos probados de la sentencia apelada, que recogía, entre otras cosas, que posteriormente la profesora también dijo a algunos alumnos que eran "gilipollas" o que "no iban a ser nada en la vida".
Los hechos por los que ha sido condenada Marisol B.M. motivaron que cerca de 300 niños del colegio no fueran a clase por decisión de sus padres y como medida de protesta por el que consideraban caso omiso de la Delegación de la Consejería de Educación hacia su petición de trasladarla del centro.
Según han informado a Efe fuentes de la Delegación Provincial de Educación en la actualidad la profesora está "jubilada", mientras que el letrado que representó a las madres denunciantes ha precisado que a raíz de los hechos fue finalmente "apartada" de la docencia en el aula de Zújar.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿Y lo primero no era el respeto?