sábado, 29 de septiembre de 2012

La Iglesia y el IBI: ¿qué paga y de qué está exenta?

Tras el aluvión de acusaciones de privilegios y las críticas de la izquierda, la Iglesia española explica la
JAVIER LOZANO 2012-05-29

Durante las últimas semanas han ido en aumento las acusaciones contra la Iglesia Católica por disfrutar de una serie de supuestos privilegios así como de ser la única institución que no ha sufrido recortes. La polémica ha ido creciendo hasta convertirse en el tema estrella de la actualidad política y casi en una cuestión de estado. Todo ello, gracias a la campaña encabezada por el Partido Socialista y otras formaciones como Izquierda Unida.

Ante esto, desde la Conferencia Episcopal han intentado explicar la realidad de los hechos y,  sobre todo, aclarar que no disfrutan de unos beneficios que no prevea la ley de por sí. De hecho, el vicesecretario de Asuntos Económicos de la Conferencia Episcopal, Fernando Giménez Barriocanal, relata qué está exento y qué no de pagar el famoso Impuesto de Bienes Inmuebles.

El régimen fiscal de la Iglesia en España viene marcado por dos puntos. El primero es el Acuerdo entre la Santa Sede y el Estado español firmado en 1979, que tiene carácter de tratado internacional y que fue refrendado por una mayoría abrumadora en el Congreso. Por otro lado, para el resto de acuerdos se rige por la legislación general de entidades no lucrativas.

A lo largo de los años se han ido produciendo distintas modificaciones como la Ley de Fundaciones y de Participaciones privadas en actividades de interés general de 1994 o la más importante, la aprobación en 2002 de la Ley de Mecenazgo.

Esta normativa establece en su Título II el régimen fiscal de las entidades sin ánimo de lucro, régimen al que se incorpora no solo la Iglesia Católica sino también las iglesias evangélicas, la comunidad judía y la islámica.

Dice el artículo 15.1 que "estarán exentos del Impuesto sobre Bienes Inmuebles los bienes de los que sean titulares, en los términos previstos en la normativa reguladora de las Haciendas Locales, las entidades sin fines lucrativos, excepto los afectos a explotaciones económicas no exentas del Impuesto sobre Sociedades".

De este modo, la Iglesia disfruta por ley de las mismas exenciones que fundaciones, partidos políticos, sindicatos, asociaciones de utilidad pública, ONG o federaciones deportivas. Aquí se incluirían partidos como IU y PSOE, cabecillas de las protestas.

En este sentido, la Iglesia Católica está exenta de pagar el IBI excepto de aquellos bienes en los que se realiza una explotación económica. Por ejemplo, si en un local perteneciente a una parroquia hay una floristería, ésta debería pagar este impuesto. Lo mismo ocurre en la tienda de dulces de un convento o en el garaje que posee la parroquia.

Debido a los acuerdos con la Santa Sede de 1979 y luego ampliados por la Ley de Mecenazgo, la Iglesia está exenta de pagar el IBI en estos casos:

    Parroquias
    Curia diocesana
    Seminarios
    Universidades de disciplinas eclesiásticas
    Casas parroquiales y residencia del Obispo
    Edificios destinados a residencia de Órdenes y Congregaciones religiosas.

Sin embargo, no estarían exentas las viviendas particulares de los sacerdotes.

Del mismo modo, la Iglesia disfruta de otra serie de beneficios que comparte con el resto de entidades no lucrativas:

    Exención del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales.
    Exención del Impuesto sobre Sucesiones.
    Exención del Impuesto sobre el incremento del valor de los terrenos cuando surge por bienes exentos de IBI.

Además, desde 2007 la Iglesia renunció, tras el acuerdo de financiación, a la exención que disponía del IVA en la entrega de bienes inmuebles, por lo que tributa como cualquier otra entidad.

En este sentido, la Conferencia Episcopal insiste en que no se beneficia de ningún privilegio sino los previstos para las entidades no lucrativas. De hecho, el hotel Palace o el Ritz están exentos de pagar el IBI, al igual que las embajadas, la SGAE, UGT, los partidos políticos o la Federación Española de Fútbol, por poner sólo algunos ejemplos.

También desmontan algunas de las acusaciones que aseguran que el denominado "IBI eclesial" representa un alto porcentaje sobre el IBI que goza de esta exención. Pero la realidad es que tan sólo en Madrid se podrían recaudar 190 millones si todo el mundo lo pagara. Sólo el 5 por ciento correspondería a la Iglesia Católica.

Mientas tanto, la Iglesia Católica critica la actuación de las decenas de ayuntamientos que han anunciado que cobrarán este impuesto pese a saber que no pueden hacerlo por no tener competencias para ello.

"La Iglesia ni tiene ni quiere tener privilegios, pero tampoco ser discriminada. Desgastar la imagen pública de una de las instituciones que más está haciendo por la gente que peor lo está pasando en la crisis, solo puede responder a intereses que nada tienen que ver con el bien común", asegura Isidro Catela, jefe de la Oficina de Información de la Conferencia Episcopal.


"si quiere se lo fotocopio"
Rubalcaba presume de que el PSOE paga el IBI "religiosamente"
"Una cosa es una catedral y otra es un parking", ha dicho sobre su propuesta de cobrar el IBI a la Iglesia. Ferraz, afirmó, lo paga "religiosamente".

    Rajoy descarta romper el tratado con El Vaticano
    Lissavetzky pedirá que también paguen partidos y sindicatos


En rueda de prensa desde la sede del PSOE, Rubalcaba se ha referido a la propuesta de su partido de empezar a cobrar el IBI a la Iglesia. Según ha dicho, la polémica nació "hace un par de meses en Italia" en relación a los impuestos y la exención de los mismos. "Se ha ido trasladando a España, en algunos ayuntamientos", ha señalado el socialista, citando a Zamora.

"El acuerdo", ha dicho en alusión al concordato con El Vaticano, "se refiere a la exención par el conjunto de instituciones que dependen de la Iglesia católica. Pero es verdad que una cosa es una catedral y otra un parking donde se cobra, al lado de la catedral". Según ha explicado, lo que pretenden es "examinar dónde están las exenciones" porque hay sitios "que no tienen por qué tener esa exención".

La periodista le había preguntado sobre la contradicción que supone que partidos y otras organizaciones también estén exentas del IBI mientras el PSOE lo reclama para la Iglesia. Rubalcaba ha zanjado el tema afirmando que "esta mañana ha pedido el recibo del IBI del último año". "Si quiere se lo fotocopio. Hemos pagado el IBI, como todo hijo de vecino. Religiosamente", ha añadido. 

Rajoy descarta romper el tratado con El Vaticano "con la que está cayendo"
El presidente del Gobierno ha descartado reforma alguna para empezar a cobrar el IBI por los bienes de la Iglesia.

viernes, 28 de septiembre de 2012

"Vi que todo se desbocaría cuando el PSC gobernó con los idenpendentistas" (José Bono)


"Vi que todo se desbocaría cuando el PSC gobernó con los idenpendentistas" (José Bono)

El desafío es tremendo.

"El Pacto del Tinell"

El acuerdo entre socialistas y PP en el País Vasco dinamita los pactos del Tinell

Hace casi cuatro años.

 

El lendakari dice que la independencia «es el peor negocio de la historia»


Patxi López rechaza responder al comunicado de ETA y tacha de «enorme sarcasmo» que la banda acuse a España y Francia de «prolongar el sufrimiento»
El lendakari, Patxi Lopez, se ha mostrado esta mañana contrario a cualquier aventurismo independentista con la advertencia de que el PSE estará «enfrente» de cualquier plan «soberanista, identitario, nacionalista», en clara alusión a las supuestas pretensiones del líder del PNV, Iñigo Urkullu, que es también su principal rival electoral y candidato a convertirse en próximo jefe del Gobierno vasco. Según López, el resultado seguro de cualquiera de esas iniciativas será «la fractura de la sociedad vasca, romper el país», por lo que el PSE se opondrá.
(…) En un acto informativo celebrado hoy en el marco del Foro Nueva Economía en Madrid, el secretario de los socialistas vascos ha acusado a su adversario de tener «varias pieles de cordero», en alusión al discurso pronunciado por Urkullu esta semana en Madrid, en el que no quiso dejar claras sus aspiraciones nacionalistas. «No nos ocultemos en el lenguaje», ha reclamado López, que también ha advertido que «el nacionalismo, por definición, es una ideología que permanentemente nos va a poner encima un conflicto para seguir existiendo».
En el turno de debate, el lendakari ha puesto en evidencia paralelismos entre los proyectos del candidato peneuvista y el presidente catalán Artur Mas, poniendo como punto de encuentro de ambos el antiguo Plan Ibarretxe, cuyo principal riesgo, recordó es «fracturar, no solo España, sino la propias sociedades catalana y vasca». «Era una propuesta que lo que hacía era dividir y enfrentar a unos vascos con otros», añadió, para marcar distancias y poner en valor que ahora, tras el mandato del PSE, «Euskadi no es el epicentro de los problemas, el Gobierno los resuelve y no los crea».
Frente al desafío de Mas, López ha avisado de que «si alguien pide la indepencia por motivos económicos, está haciendo el peor negocio de la historia», al tiempo que ha despejado: «soy más partidario de ceder soberanía a Europa que acumular soberanía para quedarme en una isla que se hundiría».
A pesar de sus críticas al PNV, al ser preguntado por la posibilidad de un pacto electoral con los nacionalistas para formar un futuro Gobierno tras el 21 de octubre, el lendakari únicamente ha eliminado la opción de entregar su voto a Bildu. «No vamos a pactar con bildu, eso es lo que descarto», ha reiterado, si bien ha advertido que el PNV «no puede presentarse como el voto útil para que Bildu no gobierne porque es el responsable de que (Bildu) esté en las instituciones».
«Hay un espacio enorme entre la independencia y la España centralizada y centralizadora y ese es el espacio que va a jugar el PSE», ha subrayado.
El sarcasmo de ETA

En relación al comunicado difundido esta mañana por ETA, el lendakari ha dicho que «es un enorme sarcasmo que diga que los Estados (francés y español) prolongan el sufrimiento después de casi 40 años de violencia». 


ETA ha instado a la izquierda abertzale a "corregir errores y superar carencias" dentro del nuevo escenario que entiende la banda que se ha abierto en el País Vasco y ha advertido que "la rueda del sufrimiento sigue girando".

En comunicado que publica 'Gara' en su edición de este jueves, la banda terrorista asegura que "puede resultar decepcionante si solo se observa cuántos pasos hemos dado para construir la paz y la actitud que mantienen los Estados que oprimen a Euskal Herria". "Y más aún", añaden, "cuando la rueda del sufrimiento sigue girando".

En el comunicado, que coincide con el 'Gudari Eguna' -jornada reivindicativa del nacionalismo vasco en honor del 'soldado vasco'-, ETA dice que mantiene su "compromiso total con el proceso de liberación y con la oportunidad de solución al conflicto". De esta forma, la banda reaparece tras varios meses con una comunicación pública y después de varios comunicados de los presos de ETA (EPKK) y de pronunciamientos del exlíder de Batasuna Arnaldo Otegi, quien desde la cárcel de Logroño concedió su última entrevista a 'Gara' y en la que atribuía a la izquierda abertzale el fin la violencia. "Es hora de curar heridas y abrir espacios de diálogo y acuerdo, para levantar entre todos los pilares de una paz estable y duradera", indica la banda terrorista. ETA insiste en sus críticas a España y Francia, a los que acusa de "cerrazón y violencia", y reclama que, frente a esto, se "redoble la presión popular".
«Llevar nuestros proyectos hasta el final»

En el comunicado, la banda envía varios mensajes a la izquierda aberztzale, a la que advierte de que sería un error "conformarse con lo logrado" para concluir que están "suficientemente preparados para afrontar los retos que tenemos por delante". "Con ello no haríamos sino limitar previamente la potencialidad del cambio de estrategia", matiza.

La organización terrorista se refiere a la "ambición de ganar" de la izquierda abertzale. "O, dicho de otro modo, de llevar nuestro proyecto político hasta el final, paso a paso", señala ETA, que precisa: "Podemos decir que la izquierda abertzale ha puesto el proceso de liberación en la buena dirección, pero todavía no estamos más que en el inicio del camino".

ETA insta a la izquierda abertzale a "corregir errores y superar carencias" y hace un llamamiento a la unión entre los sectores de la izquierda abertzale. "Los grandes objetivos solo pueden encarrilarse mediante esfuerzos y compromisos del mismo tamaño, así que ¡a luchar!", concluye la banda. En la versión del comunicado que adelanta 'Gara', ETA no hace ninguna mención a Josu Uribetxebarria Bolinaga, el preso de la banda y secuestrador de Ortega Lara al que se le ha concedido el tercer grado debido a un cáncer terminal.


El órdago nacionalista catalán



Me recuerdan mis amigos catalanes que se sienten a la vez españoles de la necesidad de anteponer el correspondiente adjetivo —nacionalista, independentista, secesionista- cuando hablamos de sus coterráneos que querrían separarse del tronco histórico y constitucional español.
Tienen toda la razón: el no hacerlo equivale a la equiparación que los tales —nacionalistas, independentistas, secesionistas- hacen entre sus propias aspiraciones y la de todos los catalanes. Como si fueran ellos los únicos representantes de la catalaneidad. Recomendación semántica esta tanto más importante cuanto que, como ya estaba previsto, el nacionalismo catalán escenifica la ocultación de sus propios fracasos con la convocatoria de unas elecciones anticipadas que tienen todas las hechuras de un plebiscito y que viene acompañada de coacciones y amenazas. Ha sido el mismo Presidente de la Generalidad de Cataluña, Artur Mas, el que, en contra del marco legal que los españoles se dieron democrática y masivamente en 1978, ya ha anunciado que procederá a la convocatoria de una consulta referendaria legal o ilegal. Sabemos suficientemente que sólo puede ser esto último. La opción por las vías de hecho que palmariamente persigue CIU, con el apoyo de formaciones afines, anuncia una inevitable y grave confrontación entre constitucionalistas y los que o no lo son, o no lo han sido nunca y confirma no sólo los peores presagios tradicionalmente adscritos a la deriva del nacionalismo sino que además describe con certeza un periodo de muy grave inestabilidad para España. Si a las elecciones del 25 de Noviembre den Cataluña añadimos las que tendrán lugar en el País Vasco y en Galicia el 21 de Octubre tendremos una aproximada visión de la incertidumbre que se cierne sobre el futuro de nuestro país. El que todavía describe el Articulo 2 de la Constitución de 1978 como “la patria común e indivisible de todos los españoles”.
Reconocer la gravedad de los hechos no debe conducir a la parálisis o a la dócil aceptación de sus consecuencias. La partida está por jugar y en ella tienen masivas posibilidades de éxito aquellos, seguramente una mayoría, que están con España y con su Constitución. Pero en ella no caben timideces ni evasivas. Es esta una historia que no se resuelve únicamente con recursos al Derecho Administrativo o con políticas de bajo perfil. Es imprescindible un liderazgo convencido y convincente que, permeando todos los recovecos de la sociedad española, tenga a las instituciones públicas, y en particular al Gobierno de la Nación como protagonistas principales de una pelea —por incruenta que resulte- en donde está en juego la misma existencia de España. Es decir, una pelea paralela y similar a la que los secesionistas catalanes vienen arteramente desplegando en contra de España.
Es por ello por lo que resulta de todo punto necesario no confundir a los nacionalistas con Cataluña, no identificar su causa con la de todos los catalanes, no añadir elementos que puedan servir para que los partidarios de la independencia vuelvan a recargar las exhaustas baterías del victimismo. Es esta una pelea a favor de la España grande, donde todos caben y nadie sobra y solo lateralmente, pero también necesariamente, una gresca en la que poner al aire las vergüenzas, las miserias, las mentiras, las corrupciones de los separatistas y de sus conmilitones. Es decir, todas las inmundicias acumuladas durante décadas de hegemonía nacionalista tolerada por el resto del cuerpo político español en la vana esperanza de que mirando para otro lado los antiespañoles de profesión acabaran por reconocer las ventajas de la vida en común. Aunque para ello tuvieran que renunciar a las prebendas surgidas de la trampa y la corrupción. Desgraciadamente no ha sido así.
La tarea no es imposible pero no por ello menos ardua. Solo el Partido Popular aparece ahora en Cataluña, y de hecho en toda España, como defensor firme y sin fisuras de la Constitución de 1978. El PSOE, tanto en versión catalana como en la vasca, sigue alardeando de las ambigüedades que han hecho de sus contradictorias “dos almas” el mejor aliado de los nacionalismos. “Ciutadans” en Cataluña y “UPyD” en toda España, pueden ser aliados significativos en esta tarea de reafirmación constitucional pero qué duda cabe: solo un frente común constitucionalista formado por PP y PSOE puede dar aliento y continuidad a la España de las libertades que conocemos desde hace treinta y cinco años. Y cuyos remotos orígenes tienen siglos de existencia.
No hay excusas: esta es la hora de la verdad. Si la troncalidad constitucional falla, si los encargados de su custodia flaquean, si los españoles que desean seguir siéndolo se encuentran huérfanos de liderazgo e inspiración, hasta lo imposible puede convertirse en realidad. Y la división de España, mal que les pese a los independentistas, no es un negocio barato. No hay nada visible tras el texto constitucional. ¿Queremos de nuevo arrojarnos al vacío?
Javier Rupérez

Embajador de España

Sin comentarios.




LLIR ENTRE CARDS

Parlar espanyol és de pobres

Salvador Sostres
A Barcelona fa molt hortera parlar espanyol, jo només el parlo amb la minyona i amb alguns empleats. És de pobres i d'horteres, d'analfabets i de gent de poc nivell parlar un idioma que fa aquest soroll tan espantós per pronunciar la jota. Aquests que no parlen en català sovint tampoc no saben anglès, ni francès, ni qui és monsieur Paccaud. Però no només a Catalunya l'espanyol és un símptoma de classe baixa. L'amic Riera em facilita aquestes dades de l'ONU del 2002. Renda per càpita de Noruega, 36.600 dòlars; Dinamarca, 30.940; Islàndia, 29.750. Tots tres països riquíssims, amb economies internacionalitzades i llengües més petites que la nostra però que les parlen sense complex. Contra aquesta absurda creença que el català ens tanca portes, aquestes dades prou eloqüents de si serveix o no serveix una llengua minoritària. En canvi en el meravellós món hispànic la pobresa és l'única dada. La mitjana dels 13 principals països americans que tenen l'espanyol com a llengua, comptat des de l'Argentina, Xile i Mèxic fins a Nicaragua, Hondures i l'Equador, és de 6.209 atrotinats dòlars de renda per càpita. Catalunya parlant català i malgrat l'espoli fiscal infligit per una Espanya que no té ni la decència de publicar les xifres del robatori, té una renda de 26.420 dòlars. Hem de triar model: Noruega o afegir-nos a la caravana de la misèria. Només cal veure com les zones més riques de l'Estat tenen una altra llengua pròpia: i és evident que l'Estat el mantenim, pagant molt i molt, els que no parlem en tercermundista. És veritat que en espanyol s'han escrit pàgines d'una bellesa emocionant, però el destí dels països que el parlen ha estat històricament d'una fatalitat irrevocable. Parlar espanyol sí que tanca portes, i destins: mira. L'independentisme a Catalunya està absolutament justificat encara que només sigui per fugir de la caspa i de la pols, de la tristesa de ser espanyol.



TRADUCCION DE LO ANTERIOR  

Alucinad con el artículo aparecido en el diario catalán AVUI.

"En Barcelona queda muy hortera hablar en español, yo solo lo hablo con la  criada y con algunos empleados. Es de pobres y de horteras, de analfabetos y de gente de poco nivel hablar un idioma que hace un ruido tan espantoso para pronunciar la jota. Estos que no hablan catalán, a menudo tampoco saben inglés, ni francés, ni quién es monsieur Paccaud. Pero no solo en Cataluña el español es un síntoma de clase baja. El amigo Riera me facilita estos datos de la ONU del  2002.
Renta per cápita de Noruega, 36.600 dólares; Dinamarca, 30940; Islandia, 29.750.
Tres países riquísimos, con economías internacionalizadas y lenguas más pequeñas que la nuestra pero que las hablan sin complejos. Contra  esta absurda creencia de que el catalán nos cierra puertas, estos datos  sobradamente elocuentes de si sirve o no  sirve  una lengua minoritaria.
En cambio en el maravilloso mundo hispánico la pobreza es el único dato. La media de los 13 principales países americanos que tienen el español como lengua, desde Argentina, Chile y Méjico hasta Nicaragua, Honduras y Ecuador, es de 6.209 maltrechos, dólares de renta per cápita. Cataluña hablando catalán y a pesar del expolio fiscal infringido por una España que  no tiene ni la decencia de publicar  las cifras del robo tiene una renta de  26.420 dolares.
Hemos de escoger modelo: Noruega o unirnos a la caravana de la miseria. El independentismo en Cataluña esta absolutamente justificado aunque solo sea para huir de la caspa y el polvo, de la tristeza de ser español".


http://www.avui.com/avui/diari/05/abr/07/ag2lli07.htm

jueves, 27 de septiembre de 2012

Convocan una manifestación contra la independencia el 12 de octubre,




La manifestación llevará por lema «Cataluña somos todos» y partirá de la plaza de Cataluña de Barcelona a las 12 horas
Sánchez-Camacho: «Espero que Mas no bordee la ilegalidad»
Pujol cree que el Tribunal Constitucional «merece poco respeto»
Bono no se imagina a Mas y Duran como «revolucionarios soviéticos» saltándose la ley
Mas anuncia un referendo independentista sea legal o ilegal
Pere Macías: «Es prematuro decir si incluiremos la palabra independencia en nuestro programa»
Pujol: «Votaría que sí en un referéndum por la independencia de Cataluña»

Diversas plataformas están convocando a través de las redes sociales una manifestación contra la independencia para el 12 de octubre, Día de la Hispanidad.
De esta forma, los promotores responden a la decisión del presidente catalán Artur Mas de adelantar las elecciones para ejercer el derecho a la autodeterminación. La manifestación llevará por lema "Cataluña somos todos" y partirá de la plaza de Cataluña a las 12 horas.
Por su parte, Agora Socialista, Asociación por la Igualdad de las Lenguas Oficiales, Asociación por la Tolerancia, Foro España Hoy, Impulso Ciudadano y Plataforma Hispanoamericana en Cataluña han elaborado un manifiesto titulado "Cataluña, tal cual" y podrían sumarse a la protesta del 12 de octubre.

La independencia no existe.



Los Estados-nación soberanos están liquidados en Europa, son residuos.
El déficit fiscal catalán es excesivo, pero no un “expolio”: arréglese.
Los catalanismos siempre antepusieron dirigir España a irse de ella
XAVIER VIDAL-FOLCH 25 SEP 2012 - 00:04 CET (El País)

Lamento traer desde Europa esta noticia: la independencia es imposible. No porque alguien la impida. Sino porque la independencia ya no existe en la Europa real, la UE. Como no existe el Estado-nación. Ni la soberanía nacional. Aún pesan. Pero son solo residuo histórico, apariencia en estado terminal, ensoñación.

El sociólogo Daniel Bell estableció ya en 1987 que el Estado era “demasiado pequeño para atender a los grandes problemas del mundo actual y demasiado grande para encarar los pequeños problemas cotidianos del ciudadano”. Desde entonces, el declive del Estado cabalga a la velocidad de la luz. Sobre todo en Europa, empujado por las pinzas trabadas entre la federalización comunitaria y la globalización; entre la transferencia de soberanía hacia arriba y el traspaso de competencias hacia abajo.

El vaciado del Estado-nación ha sido aquí tan drástico que lo ha desnaturalizado enteramente. No conserva intacta ninguna de sus grandes funciones específicas. Ni acuñar moneda (pasó al BCE), ni guardar fronteras y aduanas (suprimidas las internas del continente por Schengen; compartidas las exteriores), ni la de una verdadera política exterior (las diplomacias han iniciado su fusión lenta en el SEAE), ni la de hacer individualmente la guerra (salvo caricaturas como la de Perejil).

En estos años de crisis, el despojo de las competencias remanentes es de vértigo. Sobre todo en la economía, que es precisamente la motivación subyacente al independentismo catalán de nuevo cuño, posidentitario.
Todos los instrumentos clásicos de política económica están transferidos o se están transfiriendo a la UE:
1) El monetario y financiero, o manejo del tipo de interés y la cantidad de dinero en circulación, la supervisión bancaria.
2) El cambiario, o manejo del tipo de cambio.
3) El fiscal, o presupuesto e impuestos.
4) El comercio exterior, la tarifa exterior común, las decisiones comunes en la OMC.
5) Incluso el mercado laboral, la Seguridad Social y las políticas de empleo y sociales (de la edad de jubilación a las pensiones) se van equiparando a rebufo de la crisis.

Cataluña es identificable como tal; España no lo es sin Cataluña: se resistiría con empeño numantino
Los polemistas ágiles endosan estos argumentos, pero arguyen que ya les bastaría para sí con la sombra, residuo, símbolo o apariencia de poder de los Estados, aún notable.
Reclaman Estado, aunque esté desnudo. Se entiende en el corto plazo, pero no parece lúcido apostar a largo plazo por una construcción histórica en decadencia, llegar cuando todos se van, incluso aunque ignoren que se van. Ni es hábil agotarse en melancolías, cuando la nueva fisonomía de la Unión requiere de una rebeldía, esta sí, con causa de futuro: un potente combate por una unión política que ejerza el control democrático sobre los nuevos poderes, europeos. Si el poder está en Europa, controlemos Europa, no sus sucedáneos.

La historia. Si el beneficio de la independencia sería, pues, más bien marginal, ¿vale la pena pagar el alto coste que conllevaría?
La historia arroja pistas sobre esa relación coste-beneficio. Cataluña es imaginable como entidad diferenciada, objeto identificable, independiente, porque lo ha sido. Como Principado confederado en la época medieval; como país asociado a la monarquía francesa de Luis XIII entre 1640 y 1652; como un conjunto de “estructuras de Estado” específicas, salvo la Corona, hasta 1714; como región autónoma en los años treinta; como nacionalidad desde 1978. Pero España sin Cataluña no es pensable, rechina al imaginario colectivo. Con razón. No sería, porque al cabo España es una realidad integradora de muchos factores, pero muy destacadamente el producto de la fusión de sus matrices castellana y catalana.

¿Qué implica esto? Que viviría una secesión con desgarro ontológico: el de pasar de ser a no ser. Recordemos el trauma de la pérdida de las últimas colonias, Cuba y Filipinas; aún restalla en la conciencia colectiva el 98. Esos choques generan conflicto. La hipótesis de una separación blanda se trufa de adjetivos amables: “pacífica”; “negociada”; “ecuánime”; sin “cambios radicales” en el marco legal; en un “entorno de normalidad”, la sueñan Modest Guinjoan y Xavier Cuadras (SenseEspanya, Pòrtic, Barcelona, 2011) para minimizar su coste.

A la luz de la historia ese escenario idílico parece improbable. Más bien el recelo sería grande y la resistencia quizá numantina; comprobaremos los indicios en la campaña de Navidad. Una técnica habitual en otros lares para domeñar esas reacciones es la de la respuesta radical, populista. Lo que enconaría el conflicto Cataluña-España (o resto de) y dentro de Cataluña: liquidaría la unidad cívica del pueblo catalán. Un bien precioso siempre. Y en sociedades complejas y mestizas, aún más delicado.

Si el camino autonómico federal es imposible, ¿no lo es aún más la, más ardua, vía de la secesión?
El catalanismo. Los catalanismos —de izquierda y de derecha— de vocación mayoritaria nunca fueron independentistas (más de cinco minutos). Siempre persiguieron dos objetivos, arduos de conciliar: la autonomía de Cataluña y la participación en la dirección de España. “Cataluña ha de ir a la conquista de España”, proclamaba Enric Prat de la Riba. Apostemos por “la Catalunya gran en l’Espanya gran”, le secundaba Francesc Cambó. Lluís Companys se enfrentaba al alzamiento al lema de “Catalunya i la República dins lo cor de tots”. “Se nos asigna un papel de máquina de tren, no de maquinista”, se lamentaba Jordi Pujol. “Lo que es bueno para Barcelona, es bueno para Cataluña y bueno para España”, sintetizaba Pasqual Maragall.

Ahora se aduce que la vía autonomista hacia esos fines está cegada. Lo estaría por culpa de la inquina conservadora al Estatuto (que incluyó un seudo referéndum); de la sentencia restrictiva del Constitucional; del excesivo déficit fiscal; de la asfixia recentralizadora a las competencias de las comunidades; de la cicatería en el reparto de la factura de la crisis económico-presupuestaria. Todo eso, en uno u otro grado, es cierto. Pero no predetermina que la solución sea la separación.

Se alega que la cerrazón centralista es absoluta, que apenas hay algún federalista de ocasión más allá del Ebro (aunque, albricias, empiezan a proliferar). Por partes. ¿Acaso se olvida que esa misma España aprobó en las Cortes un Estatuto catalán avanzadísimo? Con recortes, sí, pero cuyo desmoche todos dicen lamentar, ¿o no? Pues no debía estar tan superado...

¿Es ya impracticable la vía autonómico federal? Las quejas por los retrocesos del actual Thermidor son razonables, pero si esa vía es impracticable a causa de la caverna, ¿acaso es más hacedero un camino aún más empinado? Quienes mezclan a todos y consideran que en España todos compiten en aversión a lo catalán, pueden renegar de la tradición catalanista y proyectar “nuevas ilusiones”. Pero su opción fracasó siempre. Quizá fuese más práctico no reincidir en el error. Sobre todo si al final del camino la independencia no es tal.

La economía. El último alimento de esas ilusiones independentistas está siendo el agravio financiero, el déficit fiscal —el saldo entre la contribución catalana a la Hacienda común y el flujo que recibe—, reputado excesivo. La Generalitat de Artur Mas ha nutrido la transmutación de la lógica queja crítica contra su exceso en una protesta por un supuesto“expolio”, eso tan cariñoso del “España nos roba” que pregonan los medios subvencionados.

¿Cómo la ha alimentado? Censurando la mitad de los seis cálculos de la balanza fiscal, para concluir que en 2009 el déficit catalán fue de 16.409 millones, un 8,4% de su PIB, según el método del “flujo monetario” con una de las correcciones posibles. Algo a todas luces desorbitado, por más solidario que uno pretenda ser. Con igual método pero con la corrección que olvida, sería solo de 12.216 millones, el 6,2%, como sabe el Parlamento catalán (2 de mayo, comparecencia de la profesora Maite Vilalta). La diferencia entre el 6,2% y el 8,4% es lo que permite catapultar verbalmente el exceso hacia un presunto “expolio”.

¿Exceso? Comparemos con las realidades federales más homogéneas de las que hay datos (Alemania no los da). La región más rica de Australia, la occidental, tiene un déficit del 3,93%; la de Bélgica, Flandes, del 4,4%; la de Canadá, Alberta, del 3,23%. Habrá que corregir el diferencial entre esas cifras y las nuestras, por supuesto. Pero por la vía menos traumática posible.

Que nadie se engañe, la situación actual no es resultado de ningún agravio, sino de una estrategia de muchos años con la independencia como chantaje latente.

Conozco bastante Cataluña.
Oposité a profesor de Bachillerato cuando no había Autonomías. Habían dos sedes para los Tribunales (Madrid y Barcelona).
Por suerte me tocó examinarme en Barcelona.
Mi primer destino el I.B. Pompeu i Fabra" (Martorell).
No tuve ningún problema.
Trabajé en un nocturno donde convivíamos  "catalanes y charnegos" sin ningún problema.
Uno de mis alumnos (de Esparraguera) vinculado a Convergencia i Unió me comentó una reunión con Pujol en la que les dijo: "nosotros no pero nuestros nietos serán independientes de España".
Una compañera de Química hablaba en los claustros desde la autoridad que le otorgaban "ocho apellidos catalanes".
Ramón Tibau Gironés (Secretario del Instituto) se comunicaba con sus compañeros con documentos en "catalán", un día descubrí que primero los escribía en "castellano" y luego los traducía. Otro compañero de Química se los devolvía con las faltas ortográficas y sintácticas corregidas (era valenciano pero era muy culto y amaba la lengua catalana)...
Salvo cosas como éstas añoro esos años que pasé en Barcelona donde trabajé investigando en el Archivo de la Corona de Aragón y en el de la Ciudad de Barcelona y transcribí, entre otros documentos, el "Memorial de Egreuges" dirigido a Carlos III (no tengo a mano la fecha)..

Recojo un trozo de una Tribuna del País que me parece muy oportuna.   

"(...) Eso sobre los fundamentos, pero ahora estamos en otra cosa, en una respuesta política a la iniciativa del nacionalismo.
Quien se cargó el pacto fiscal fue Mas.
El pacto fiscal no es una alternativa a la independencia cuando se nos dice que es el camino a la independencia. Si no estamos en lo mismo, no cabe discutir sobre fiscalidad. Y si estamos en lo mismo, entonces, entre todos, como conciudadanos, no como pueblos, nos ocupamos de la justicia distributiva —no de la solidaridad, que no somos una ONG— atendiendo al principio —de la Constitución española, que no de la venezolana— de que “toda la riqueza del país en sus distintas formas y sea cual fuere su titularidad está subordinada al interés general”.
Es posible que, como respuesta política, en algún momento, debamos preguntar por la independencia. Una pregunta que por lo dicho, porque Cataluña, como territorio político, no es más mía que de Anasagasti —por mencionar a un manifestante del otro día en Barcelona—, debería hacerse a todos los españoles. De todos modos, quizá, en el orden de las cosas, haya que pasar por una consulta en Cataluña. Sobre eso, poco que añadir a lo escrito aquí mismo por Ruiz Soroa.
Pero ese sería el final de un largo recorrido.
El primer paso es que Mas vaya a unas elecciones con la independencia por bandera. Sin subterfugios. Con la palabra exacta: independencia. Su guión es nuevo: sus votantes compraron una negociación y ahora les ofrece un drama. Es algo más que el truco fundante del nacionalismo: un conjunto de individuos (los nacionalistas) sostiene que otro conjunto de individuos (más numeroso) es una nación y que ellos son sus portavoces. Ahora nos dice que esos otros quieren irse de un país.
Un mensaje que no admite presentaciones desdramatizadas. Mas nos tiene que contar en detalle cómo va a llegar a la independencia y su precio. Quizá los catalanes comiencen a reparar —los empresarios, ya avisan— que la fuente de sus problemas no es “Madrid”, sino sus dirigentes.
No solo Mas tiene que hablar. No está de más decirlo.
Con frecuencia, ante las tesis nacionalistas, buena parte de nuestra clase política no pasa del “no estoy de acuerdo, pero las respeto”. Como si les preguntaran sobre el vegetarianismo. A nadie se le ocurriría responder lo mismo a cuenta del sexismo. Si uno está en contra de algo, lo que hace es combatirlo en buena ley democrática. Tampoco vale, ahora menos que nunca, esa actitud intimidada que lleva a tantos a no opinar sobre lo que pasa en otra parte de España. Personas capaces de manifestarse en contra de remotas injusticias se callan ante el temor de que les digan que “no se metan en nuestras cosas”. Se han de escuchar todas las voces, no ya porque seguimos hablando de redistribución de riqueza entre conciudadanos o de vetos que rompen la igualdad en el mercado de trabajo, sino porque se trata del marco político de todos. Y su ruptura tendrá consecuencias en la vida de todos.

El cuento de que todo seguirá como si tal cosa es una patraña más de los nacionalistas
Pero hay otras razones para que todos hablen.
En esas elecciones votaremos los catalanes, pero antes de hacerlo nos importa saber qué estamos decidiendo, qué nos jugamos. Algo que no depende de nosotros. Y Mas no puede contestar a las preguntas importantes, que no son que si ejército o Barça, sino qué pasará con las empresas españolas, los mercados, las pensiones, los funcionarios del Estado, nuestros ahorros, la financiación de nuestras empresas y mil cosas más. 
Mas nos dirá que la vida sigue igual.
Pero nos mentirá.
Lo que pueda venir después de una separación no depende de sus fantasías. No se ve por qué quienes tanto nos malquieren, tras un desgarro de tal magnitud, van a estar deseando amistar en una confederación.
El cuento de que todo seguirá como si tal cosa es una patraña más de los nacionalistas.
Por ejemplo, cuando les preguntan por la Unión Europea. En esto, al menos, Pujol ha sido sincero. Estaremos fuera.
Esto se ha puesto serio y ya nada va a ser igual.
Mas se ha metido en un fangal y si encalla, no puede pretender que, al final, todo sea como antes. Ya no cabe el equilibrismo.
Es posible que los nacionalistas intenten una nueva pirueta, pero es cosa de todos —un debate nacional— recordarles que ellos han dibujado un dilema en el que no hay terceras vías ni marcha atrás.
Que nadie se engañe, la situación actual no es resultado de ningún agravio, sino de una estrategia de muchos años con la independencia como chantaje latente. 
 Sin tregua, porque, alimentada de su propio éxito, el resultado siempre era el mismo: tan ofendidos como antes y los demás preguntándonos qué habíamos hecho. Una meditada ingeniería social consentida por todos ha permitido levantar una sociedad de ficción. Así ha sido posible que aceptáramos delirios como que los catalanes no puedan escolarizarse (también) en su lengua mayoritaria y común. Ahora Mas ha dado por terminado el juego. Bien, le tomamos la palabra. A las elecciones sin ambigüedades. A sabiendas, eso sí, de que al día siguiente nada volverá a ser igual. Entre todos discutiremos esto y discutiremos todo. Desde el principio".

Félix Ovejero es profesor de la Universidad de Barcelona. Su último libro publicado es La trama estéril  (Montesinos). (Tribuna El País).

miércoles, 26 de septiembre de 2012

La crisis





Plebiscito




Preocupante






RAJOY, A VERLAS VENIR EN CATALUÑA.


 Luis María Ansón
La política seria no consiste en curar sino en prevenir. Mariano Rajoy siempre ha tenido una posición contraria a esta idea. Cree que en la mayor parte de los casos lo mejor es no hacer nada y que el tiempo resuelva las cosas. Se equivoca. Es verdad que en alguna ocasión aislada lo inteligente es dar tiempo al tiempo. En la mayoría de los casos, sin embargo, la solución de los problemas exige anticipación y actividad.
Rajoy todavía no ha movido un dedo ante el alud desencadenado por Mas. Está a verlas venir. Debería haberse reunido ya una decena de veces con Rubalcaba para formar una alianza constitucional e impedir que el presidente catalán galope a sus anchas. Mas ha tomado la iniciativa, Rajoy va a remolque. Ciertamente tiene grandes problemas para solucionar en Europa y eso lo está haciendo muy bien. Pero el desafío catalán no se puede aplazar. Es necesario trazar de común acuerdo con Rubalcaba un plan estratégico que impida al líder de CiU fracturar la vida nacional y quebrar la unidad de España.
Qué error, qué inmenso error permanecer con los brazos cruzados ante lo que se avecina. El Estado de Derecho está en la obligación de desplegar todas sus armas para impedir la secesión de Cataluña y para enviar a Artur Mas al zaquizamí de la Historia.

Luis María ANSON
de la Real Academia Española


LOS MILITARES ADVIERTEN A MAS
El delito de alta traición en el vigente Código Penal español
Este lunes, la Asociación de Militares Españoles (AME) advirtió a Artur Mas: los representantes políticos deben "guardar y hacer guardar la Constitución Española", que debe ser aplicada por "la más alta Magistratura y los Gobiernos" para "suprimir cualquier atisbo de secesión". Todo participante en la "fractura de España", en alusión al Ejecutivo de Cataluña, es susceptible de ser juzgado por "alta traición" ante los tribunales de la jurisdicción castrense. La legislación en materia de alta traición dice lo siguiente:
Ley Orgánica 10/1995, de 23 de noviembre, del Código Penal
TÍTULO XXIII.
DE LOS DELITOS DE TRAICIÓN Y CONTRA LA PAZ O LA INDEPENDENCIA DEL ESTADO Y RELATIVOS A LA DEFENSA NACIONAL.
CAPÍTULO I.
DELITOS DE TRAICIÓN.
Artículo 581.
El español que indujere a una potencia extranjera a declarar la guerra a España o se concertare con ella para el mismo fin, será castigado con la pena de prisión de quince a veinte años.
Artículo 582.
Será castigado con la pena de prisión de doce a veinte años:
El español que facilite al enemigo la entrada en España, la toma de una plaza, puesto militar, buque o aeronave del Estado o almacenes de intendencia o armamento.
El español que seduzca o allegue tropa española o que se halle al servicio de España, para que se pase a las filas enemigas o deserte de sus banderas estando en campaña.
El español que reclute gente o suministre armas u otros medios eficaces para hacer la guerra a España, bajo banderas enemigas.
Artículo 583.
Será castigado con la pena de prisión de doce a veinte años:
El español que tome las armas contra la Patria bajo banderas enemigas.
Se impondrá la pena superior en grado al que obre como jefe o promotor, o tenga algún mando, o esté constituido en autoridad.
El español que suministre a las tropas enemigas caudales, armas, embarcaciones, aeronaves, efectos o municiones de intendencia o armamento u otros medios directos y eficaces para hostilizar a España, o favorezca el progreso de las armas enemigas de un modo no comprendido en el artículo anterior.
El español que suministre al enemigo planos de fortalezas, edificios o de terrenos, documentos o noticias que conduzcan directamente al mismo fin de hostilizar a España o de favorecer el progreso de las armas enemigas.
El español que, en tiempo de guerra, impida que las tropas nacionales reciban los auxilios expresados en el número 2 o los datos y noticias indicados en el número 3 de este artículo.
Artículo 584.
El español que, con el propósito de favorecer a una potencia extranjera, asociación u organización internacional, se procure, falsee, inutilice o revele información clasificada como reservada o secreta, susceptible de perjudicar la seguridad nacional o la defensa nacional, será castigado, como traidor, con la pena de prisión de seis a doce años.
Artículo 585.
La provocación, la conspiración y la proposición para cualquiera de los delitos previstos en los artículos anteriores de este Capítulo, serán castigadas con la pena de prisión inferior en uno o dos grados a la del delito correspondiente.
Artículo 586.
El extranjero residente en España que cometiere alguno de los delitos comprendidos en este Capítulo será castigado con la pena inferior en grado a la señalada para ellos, salvo lo establecido por Tratados o por el Derecho de gentes acerca de los funcionarios diplomáticos, consulares y de Organizaciones internacionales.
Artículo 587.
Las penas señaladas en los artículos anteriores de este Capítulo son aplicables a los que cometieren los delitos comprendidos en los mismos contra una potencia aliada de España, en caso de hallarse en campaña contra el enemigo común.
Artículo 588.
Incurrirán en la pena de prisión de quince a veinte años los miembros del Gobierno que, sin cumplir con lo dispuesto en la Constitución, declararan la guerra o firmaran la paz.
CAPÍTULO II.
DELITOS QUE COMPROMETEN LA PAZ O LA INDEPENDENCIA DEL ESTADO.
Artículo 589.
El que publicare o ejecutare en España cualquier orden, disposición o documento de un Gobierno extranjero que atente contra la independencia o seguridad del Estado, se oponga a la observancia de sus Leyes o provoque su incumplimiento, será castigado con la pena de prisión de uno a tres años.
Artículo 590.
1. El que, con actos ilegales o que no estén debidamente autorizados, provocare o diere motivo a una declaración de guerra contra España por parte de otra potencia, o expusiere a los españoles a experimentar vejaciones o represalias en sus personas o en sus bienes, será castigado con la pena de prisión de ocho a quince años si es autoridad o funcionario, y de cuatro a ocho si no lo es.
2. Si la guerra no llegara a declararse ni a tener efecto las vejaciones o represalias, se impondrá, respectivamente, la pena inmediata inferior.
Artículo 591.
Con las mismas penas señaladas en el artículo anterior será castigado, en sus respectivos casos, el que, durante una guerra en que no intervenga España, ejecutare cualquier acto que comprometa la neutralidad del Estado o infringiere las disposiciones publicadas por el Gobierno para mantenerla.
Artículo 592.
1. Serán castigados con la pena de prisión de cuatro a ocho años los que, con el fin de perjudicar la autoridad del Estado o comprometer la dignidad o los intereses vitales de España, mantuvieran inteligencia o relación de cualquier género con Gobiernos extranjeros, con sus agentes o con grupos, Organismos o Asociaciones internacionales o extranjeras.
2. Quien realizara los actos referidos en el apartado anterior con la intención de provocar una guerra o rebelión será castigado con arreglo a los artículos 581, 473 ó 475 de este Código según los casos.
Artículo 593.
Se impondrá la pena de prisión de ocho a quince años a quien violare tregua o armisticio acordado entre la Nación española y otra enemiga, o entre sus fuerzas beligerantes.
Artículo 594.
1. El español que, en tiempo de guerra, comunicare o hiciere circular noticias o rumores falsos encaminados a perjudicar el crédito del Estado o los intereses de la Nación, será castigado con las penas de prisión de seis meses a dos años.
2. En las mismas penas incurrirá el extranjero que en el territorio español realizare cualquiera de los hechos comprendidos en el apartado anterior.
Artículo 595.
El que, sin autorización legalmente concedida, levantare tropas en España para el servicio de una potencia extranjera, cualquiera que sea el objeto que se proponga o la Nación a la que intente hostilizar, será castigado con la pena de prisión de cuatro a ocho años.
Artículo 596.
1. El que, en tiempo de guerra y con el fin de comprometer la paz, seguridad o independencia del Estado, tuviere correspondencia con un país enemigo u ocupado por sus tropas cuando el Gobierno lo hubiera prohibido, será castigado con la pena de prisión de uno a cinco años. Si en la correspondencia se dieran avisos o noticias de las que pudiera aprovecharse el enemigo se impondrá la pena de prisión de ocho a quince años.
2. En las mismas penas incurrirá el que ejecutare los delitos comprendidos en este artículo, aunque dirija la correspondencia por país amigo o neutral para eludir la Ley.
3. Si el reo se propusiera servir al enemigo con sus avisos o noticias, se estimará comprendido en el número 3 o el número 4 del artículo 583.
Artículo 597.
El español o extranjero que, estando en el territorio nacional, pasare o intentare pasar a país enemigo cuando lo haya prohibido el Gobierno, será castigado con la pena de multa de seis a doce meses.
CAPÍTULO III.
DEL DESCUBRIMIENTO Y REVELACIÓN DE SECRETOS E INFORMACIONES RELATIVAS A LA DEFENSA NACIONAL.
Artículo 598.
El que, sin propósito de favorecer a una potencia extranjera, se procurare, revelare, falseare o inutilizare información legalmente calificada como reservada o secreta, relacionada con la seguridad nacional o la defensa nacional o relativa a los medios técnicos o sistemas empleados por las Fuerzas Armadas o las industrias de interés militar, será castigado con la pena de prisión de uno a cuatro años.
Artículo 599.
La pena establecida en el artículo anterior se aplicará en su mitad superior cuando concurra alguna de las circunstancias siguientes:
Que el sujeto activo sea depositario o conocedor del secreto o información por razón de su cargo o destino.
Que la revelación consistiera en dar publicidad al secreto o información en algún medio de comunicación social o de forma que asegure su difusión.
Artículo 600.
1. El que sin autorización expresa reprodujere planos o documentación referentes a zonas, instalaciones o materiales militares que sean de acceso restringido y cuyo conocimiento esté protegido y reservado por una información legalmente calificada como reservada o secreta, será castigado con la pena de prisión de seis meses a tres años.
2. Con la misma pena será castigado el que tenga en su poder objetos o información legalmente calificada como reservada o secreta, relativos a la seguridad o a la defensa nacional, sin cumplir las disposiciones establecidas en la legislación vigente.
Artículo 601.
El que, por razón de su cargo, comisión o servicio, tenga en su poder o conozca oficialmente objetos o información legalmente calificada como reservada o secreta o de interés militar, relativos a la seguridad nacional o la defensa nacional, y por imprudencia grave dé lugar a que sean conocidos por persona no autorizada o divulgados, publicados o inutilizados, será castigado con la pena de prisión de seis meses a un año.
Artículo 602.
El que descubriere, violare, revelare, sustrajere o utilizare información legalmente calificada como reservada o secreta relacionada con la energía nuclear, será castigado con la pena de prisión de seis meses a tres años, salvo que el hecho tenga señalada pena más grave en otra Ley.
Artículo 603.
El que destruyere, inutilizare, falseare o abriere sin autorización la correspondencia o documentación legalmente calificada como reservada o secreta, relacionadas con la defensa nacional y que tenga en su poder por razones de su cargo o destino, será castigado con la pena de prisión de dos a cinco años e inhabilitación especial de empleo o cargo público por tiempo de tres a seis años.

"Colaborar en la fractura de España puede acabar en la jurisdicción castrense"

La Asociación de Militares Españoles (AME) ha avisado este lunes de que quienes colaboren o permitan la "fractura" de España deberán "responder con todo el máximo rigor" ante los tribunales en el ámbito de la jurisdicción castrense por la "grave acusación de alta traición".
En un comunicado, la AME esta asociación avisa de que "la más alta magistratura" y los "Gobiernos" deberían tomar "inmediatamente las medidas oportunas para suprimir cualquier atisbo de secesión, sin que las Fuerzas Armadas se vean en la irremisible y gravísima tesitura de cumplir escrupulosa y estrictamente con la misión que la Carta Magna les otorga de garantizar la soberanía, independencia e integridad territorial de nuestra Patria".
"Si así tuvieran lamentablemente que actuar -alertan-, no deberá existir la menor duda de que cuantos han permitido, participado o colaborado en llegar a esta última pero reiterada en el tiempo amenaza de fractura de España, por comisión, omisión o provecho de sus cargos constitucionales, habrán de responder con todo el máximo rigor de tan grave acusación de alta traición ante los tribunales en el ámbito de la jurisdicción castrense".
Para esta asociación, la actitud del presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, y de los miembros "separatistas" de su Parlamento es "improcedente e inadmisible" y "no se compadece de ninguna de las maneras con el deber y la responsabilidad que, como representantes del Estado, están obligados a observar y ejercer".
A juicio de AME, los acontecimientos actuales en Cataluña son el resultado de "una pavorosa crisis económica y otra manifiestamente desastrosa gestión política por parte de las formaciones que incurren en un delito de alta traición al mantener de forma voluntaria un sistema de representación electoral que fomenta la aparición y el asentamiento de los nacionalismos separatistas al ceder ante su chantaje de votos para mantenerse en el poder".