Canarias reclama una Relación Bilateral con España.

El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, insiste en que "Canarias es un país, un territorio diferenciado que presenta unas singularidades únicas que deben ser atendidas".

Por ello, agrega, Coalición Canaria cree que las Islas deben tener "una relación bilateral con el Estado".

Aliado del Partido Popular en el Gobierno insular, CC aprobó en su congreso nacional una ponencia en la que definía a Canarias como una Nación.

En una entrevista concedida a El Mundo, Rivero matiza: "una cosa es lo que proponen determinadas personas o lo que defienden miembros de la Juventudes y otra es la realidad, la ponencia no dice eso".
Eso sí, "en nuestras relaciones con Europa es necesaria la bilateralidad porque somos una comunidad ultraperiférica, y así está reconocida, al igual que ocurre con otros territorios muy alejados".

Para Rivero, las "singularidades" de Canarias obligan a una "relación bilateral". "Pero eso no significa que esas relaciones se mantengan en un plano de igual a igual o desde un plano superior a uno inferior, significa que determinados problemas se tienen que discutir entre ambas partes, no en un foro del Estado con las 17 comunidades", asevera.

El presidente del Gobierno de Canarias insiste pues en "la asunción de competencias esenciales dada nuestra lejanía y la singularidad de nuestro territorio". No se siente más cerca ni del PP, con quien gobierna en las Islas, ni del PSOE, con quien alcanza numerosos acuerdos en el Congreso de los Diputados.
Ya en otro orden de cosas, Rivero dice de Fernando López Aguilar que "no le gustan las Canarias" y que "nunca le han interesado". "Por eso se va a Europa, porque prefiere hacer política lejos de las islas", añade.
Sobre la crisis económica, afirma que "cuando todos los nacionalistas la anunciaban, el Gobierno y el PSOE se empeñaron en mirar para otro lado y no se abordaron reformas estructurales".

16-11-2008.- (Europa Press) El diputado regional de Coalición Canaria (CC) y acalde de Santa Cruz de Tenerife, Miguel Zerolo, ha asegurado este domingo en un artículo publicado en el periódico Diario de Avisos que "si existe algún recién nacido nacionalismo excluyente y radical, ese es sin duda el nacionalismo español".

"Escuchar otra vez alusiones a la indisoluble unidad de la patria, al incontestable e indiscutible hecho nacional español, establecido no a través del 'querer ser' de todos, sino a la vigencia de leyes que ni pueden ser discutidas ni pueden ser cambiadas, es como mínimo tan irracional como lo contrario. Y escuchar que al nacionalismo canario se le acuse de excluyente, cuando es evidente que quien está desarticulando el título VIII de la Constitución de 1978, por la puerta de atrás, es la burocracia de Madrid a través de sus alianzas estratégicas con los nacionalistas catalanes y vascos, me parece bastante más que injusto", explica el dirigente en un amplio texto.

(...) "la configuración del Estado está cambiando". "No sé hacia dónde iremos, si a un modelo federal o, por reacción, hacía un endurecimiento del centralismo. Lo que sí tengo claro es que ahora mismo esa no es la batalla de Canarias".

"Para los intereses de Canarias da absolutamente igual el resultado final de esa pugna entre el 'españolismo centralista' del PP y el federalismo forzado del PSOE. Porque sea en un escenario o sea en el otro, Canarias tiene que situarse en un estatus distinto, radicalmente distinto, al del café para todos que se pacte para los territorios peninsulares", argumenta al tiempo que insiste en que "ese modelo, centralista o federal, no nos vale a efectos económicos y fiscales".

Pide “soberanía fiscal y económica”.

En este punto, Zerolo recalca que es el económico "el terreno que nos debe importar, por más que sea tentador perderse en la eterna discusión política de la España nacional o plurinacional, en esa España como problema, en ese estado invertebrado que llevamos arrastrando desde hace casi un siglo". Y sentencia que "somos mendigos RUP (Regiones Ultraperifércias)".

Por ello propone que hay que "acabar" con ese papel en alusión a que el archipiélago ha recibido ayudas de fondos europeos y estatales y mantiene que "debemos ser libres y aprender a ser ese pueblo diferente, ese pueblo comercial y activo, ese pueblo que históricamente supo estar abierto al mundo sin perder sus lazos con Europa".

"Ese es el nacionalismo en el que creo, el que veo posible y el que veo útil para la gente que vive en Canarias"."Y creo en esa soberanía fiscal y económica, porque es el verdadero camino para no depender. Solo quienes son capaces de generar sus propios recursos y vivir conforme a sus méritos y esfuerzos pueden ser realmente libres", asume Zerolo que también explica que "desde un punto de vista práctico, si alguien me dibujara mañana una Canarias independiente y políticamente soberana donde sus dirigentes construyesen un Estado de Bienestar basado en crecientes cargas fiscales, aranceles a las importaciones y un gasto público superior al 60% del producto interior bruto, me parecería una pesadilla".El alcalde de la capital afirma además que "claro que la independencia nos otorgaría la capacidad de decidir nuestro modelo económico, pero esa soberanía no necesariamente atraviesa el terreno de la política que, si se quiere desde un punto de vista práctico –no hace falta llegar más lejos– ni está en nuestras manos, ni me parece al alcance de nuestras fuerzas ni, además, recabaría un apoyo general de la sociedad canaria de hoy".Por último, el diputado regional también indica que "podríamos caminar al encuentro de un consenso, en la necesidad de que se regresen a las islas sus libertades económicas y fiscales, se nos otorguen lo que no eran privilegios sino capacidades para que quienes vivían en un archipiélago lejano fueran capaces, como fueron, de labrarse su propia prosperidad y la de sus descendientes".