
Los carteles obligatorios en las obras coincidirán con las Elecciones Europeas.
El coste aproximado de los carteles ascenderá a 30 millones de euros.
Su extensión será equivalente a vallar la autopista Valencia-Castellón
Pero, ¿en qué se concreta realmente el munífico fondo municipal que el gurú José Blanco ha calificado como «clave» para superar la crisis?.
Algunos ejemplos:
En Alicante:
*.- en Almudaina (127 habitantes), 100.000 euros se utilizarán para rehabilitar el lavadero público.
*.- en Torrevieja se construirán campos de fútbol y de rugby y zona deportiva de raquetas.
*.- en Alicante pistas de pádel con un coste de 160.000 euros.
*.- en Elche se destinará un millón de euros para la mejora de las piscinas municipales, otros 90.000 para un circuito de automodelismo y 98.400 más para ampliar las gradas del campo de rugby.
Quizá el paro no se ataje a medio plazo, pero la nueva España cardiosaludable puede arrasar en los Juegos Olímpicos de Londres.
Barcelona se «inventa» 303 proyectos para aprovechar el fondo de Zapatero
*.- Poner hierba artificial en el campo de fútbol municipal del barrio de Vallvidrera, 500.000 euros.
*.- instalar un altillo en un centro de atención al ciudadano, 40.000 euros.
*.- y rehabilitar la valla del recinto de los felinos del zoo, 174.000 euros.
Éstos son tres de los 303 proyectos que el Ayuntamiento de Barcelona hará gracias al fondo Zapatero.
Como el resto de municipios españoles, Barcelona se ha apuntado a la carrera para hacerse con un pico de los 8.000 millones de euros del fondo extraordinario del Gobierno para los ayuntamientos como receta anticrisis. ¿Qué hacer con 282 millones?
Por número de habitantes, le correspondían 282 millones de euros. Esta lluvia de millones fue bien recibida, porque, como recordó el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, «a nadie le amarga un dulce».
El inconveniente está en que el ayuntamiento se vio obligado a decidir en qué gastaba el dinero del Gobierno en un mes y medio y con los presupuestos de 2009 prácticamente cerrados.
El poco margen de maniobra convirtió el plan de Zapatero en «una solución que busca problemas». ¿En qué gastar el dinero? Ésta es la pregunta que se ha hecho Hereu y el resto de alcaldes de los 8.112 municipios españoles cuando el presidente anunció su plan. En poco más de un mes, Barcelona se «ha inventado» 303 proyectos en los que gastar los 282 millones que le tocaban. Sacó ideas de las obras programadas para el período 2010-2011 y descartadas hasta el próximo mandato.
El desarrollo de estos proyectos representa el 27 por ciento de la inversión municipal para 2009, que es de 1.028 millones de euros, y generará 4.869 empleos. También servirá para paliar el azote de la crisis, aunque sólo por un año.
La oposición (PP y CiU) no habla por hablar cuando dice que a medio plazo la medida no resuelve los problemas estructurales que padecen desde hace años los municipios. El Gobierno sigue sin cumplir con la inversión que exige la Carta Municipal de Barcelona y el ayuntamiento - del mismo color político que el Ejecutivo- no planta cara a Zapatero. De momento, el Fondo Estatal de Inversión Local adelantará la gincana estival de obras al mes de abril, cuando empiecen a ejecutarse los proyectos. Como el plan prohíbe que ninguna actuación supere los cinco millones, no habrá ninguna operación urbanística de gran calado. El plan anticrisis actuará como una bomba racimo sobre la ciudad, dispersará obras pequeñas y medianas. El alcalde ya alertó de que los 130 millones para mejorar el espacio público «complicarán la movilidad». Lo bueno es que habrá wifi antes en toda la ciudad.
Todas las infraestructuras del «plan Z» (a su vez incluido dentro del «plan E»), son apenas una tirita para una brecha demasiado profunda, pero no han recibido críticas por lo que suponen en sí mismas (menos es nada y hay que salir al paso de una situación dramática), sino por el botafumeiro en que las envuelve Zapatero, que no acierta a ofrecer a los ciudadanos más solución que ésta, de tan corto vuelo.
El Gobierno ZP exigirá inmensos carteles en las obras que financia
El Gobierno Zapatero está convirtiendo España en un país de chiste. Ahora resulta que en cada obra en la que invierta dinero debe aparecer un gran cartel que lo publicite. Se da la paradoja de que el precio del cartel superará en ocasiones el presupuesto de la propia obra. Está claro que el Fondo Estatal de Inversión Local va a beneficiar sobre todo a los fabricantes de carteles.
El alcalde de Valladolid, Francisco Javier León de la Riva, consideraría "sensato" si hubiera que colocar carteles en las obras de más de un millón de euros. Pero apunta que en algunos ayuntamientos pequeños hay actuaciones por valor de 1.100 euros cuando los carteles se negocian, apunto, "entre 1.200 y 1.600 euros cada uno".
El alcalde 'popular' critica la "obsesión" que, a su juicio, tiene el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero por la "propaganda". Así, señaló que en el primer decreto sobre el Fondo se obligaba a colocar un cartel de un metro de ancho por metro y medio de alto, "pero a los pocos días", añadió, se pasaba a unas medidas de tres de ancho por cuatro de alto "independientemente del presupuesto de la obra y además montado sobre unas zapatas de dos metros de altura para que se vea bien
http://www.elmundo.es/elmundo/2009/01/16/valencia/1232113374.html