La nueva Mesa del Congreso incumple la Ley de Igualdad.
La nueva Mesa del Congreso de los Diputados elegida este martes en la sesión constitutiva de la Cámara Baja no cumple los requisitos de paridad que la Ley de Igualdad fija, por ejemplo, para las listas electorales y los consejos de administración, ya que sólo tres de sus nueve miembros son mujeres y por tanto se incumple el requisito de que ninguno de los dos sexos supere el 60 por ciento o tenga una representación inferior al 40 por ciento.
El órgano de gobierno de la Cámara tendrá sólo un 33,4 por ciento de representación femenina, frente al 66,6 por ciento que suman los hombres.
Las mujeres ocuparán dos vicepresidencias (la primera, que ha recaído en la socialista Teresa Cunillera, y la segunda, que ha sido para Ana Pastor, del PP).
Entre los secretarios sólo habrá una mujer, la 'popular' Celia Villalobos, que será secretaria cuarta y que en la anterior legislatura ejerció como secretaria segunda.
El PP, que recurrió la imposición de la democracia paritaria ante el Tribunal Constitucional, sí ha cumplido la norma en sus candidaturas para la Mesa, porque ha propuesto dos hombres y dos mujeres y todos ellos han sido elegidos.
Inicialmente, el PSOE también presentó dos candidatos y dos candidatas para el órgano de gobierno de la Cámara, pero tuvo que 'sacrificar' a una de ellas al haber cedido al PNV la Secretaría que había reservado para la extremeña Soledad Pérez.
Los nacionalistas vascos, que no tienen mujeres en sus filas, han colocado como secretario segundo a José Ramón Beloki, mientras que CiU, aunque cuenta con cuatro diputadas, ha preferido situar en la Mesa a Jordi Jané, que será vicepresidente segundo.
En comparación con la legislatura anterior, la Mesa del Congreso pierde una mujer (hace cuatro años fueron elegidas una vicepresidenta y tres secretarias.
La Ley de Igualdad, que se aplicó por primera vez en unos comicios legislativos el pasado 9 marzo, tampoco ha tenido efecto en la composición general del Congreso, ya que la IX Legislatura arranca con dos diputadas menos que las elegidas en 2004 (han tomado posesión de su escaño un total de 123, que representan al 35 por ciento del hemiciclo).
La norma obligaba a los partidos a que, en cada tramo de cinco puestos de sus candidaturas, ninguno de los dos sexos superara el 60 por ciento o estuviera por debajo del 40 por ciento, lo que no garantizaba que ninguno de los dos géneros copara los puestos de salida (en la mayoría de las candidaturas la proporción era de tres a dos en estos tramos a favor de los hombres. Esto ha traído consigo que haya circunscripciones en las que sólo hayan resultado elegidos candidatos masculinos. Este es el caso de Guadalajara, Avila, Segovia, Zamora, Ceuta y Melilla. Por el contrario, en Cantabria toda la representación del PSOE es femenina, ya que sus dos candidatas elegidas son mujeres).
El partido con más diputadas es el PSOE, 72 diputadas (20,5 por ciento del hemiciclo). Le sigue el PP, con 43 (12,2 por ciento). En el grupo parlamentario que forme CiU habrá cuatro mujeres.
En el arranque de la IX Legislatura sólo hay dos partidos con representación plenamente paritaria en el Congreso: el Bloque Nacionalista Galego y Coalición Canaria, que han obtenido un diputado y una diputada cada uno.
A estas se unen las diputadas que han logrado Nafarroa Bai y Unión Progreso y Democracia (UPyD). Hay cuatro formaciones que no tienen ninguna mujer en sus filas. Se trata del PNV, ERC, IU e ICV.
En la pasada legislatura, obtuvieron escaño un total de 125 diputadas, de las que 74 pertenecían al PSOE y 73 al PP. A ellas se sumaron otras ocho, una de cada uno de los partidos minoritarios (CiU, BNG, Nafarroa Bai, ERC, EA, ICV, PNV e IU).
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