miércoles, 27 de mayo de 2009

La guerra no ha terminado


José María Carrascal (ABC)
NINGUNA guerra dura más que las civiles, y que la nuestra no terminó el 1 de abril de 1939, sino que continúa, vino a confirmarlo el debate entre Juan Fernando López Aguilar y Jaime Mayor Oreja el lunes por la noche en Televisión española.

El candidato socialista no tuvo ningún reparo en echar mano del franquismo para descalificar a su interlocutor, como si Franco siguiera vivo, en vez de haber muerto hace 34 años. No fue esa su única alusión a las dos Españas que se midieron en el campo de batalla. Su entero parlamento estuvo dedicado a resucitar el viejo duelo entre izquierdas y derechas, con él representando el progreso, y su adversario, la reacción. Lo creíamos superado, pero es la herencia de Zapatero, que nos ha hecho retroceder a la confrontación cainita, en su afán de dar la vuelta a la guerra civil que perdió uno de sus abuelos y ganó el otro, como ocurrió en tantas familias españolas. Lo malo es que para ganar esa guerra tiene que librarla de nuevo. Es a lo que se ha dedicado en sus cinco años de gobierno, a lo que se dedican sus ministros y a lo que se dedicó López Aguilar ante millones de telespectadores. No lo hacen sólo por motivos ideológicos, sino también por necesidades electorales. La crisis les ha arrinconado de tal forma y ha puesto tan al desnudo su fracaso que ya no les queda otro argumento que identificar al PP con el franquismo. Mayor Oreja podía haber recordado a su temerario interlocutor la larga lista de dirigentes socialistas españoles que entonaron loas a Stalin, a Mao, a Ho Chi Minh, a Fidel Castro. No lo hizo, no sé si por elegancia o por preferir recordar sus servicios a la Transición democrática y a la lucha contra ETA en el País Vasco, en la que, como tantos, arriesgó su vida. Hechos frente a eslóganes. Ese fue el debate. Lo malo para el PP y lo bueno para el PSOE es que, en televisión, los eslóganes se venden mejor que los hechos. Y aunque los hechos terminan imponiéndose, ocurre demasiado tarde la mayoría de las veces.
De ahí que prefiera clasificar el debate como un clásico encontronazo entre el ayer y el hoy. Pero, atención a esto, donde el hoy estaba representado por el candidato del PP y el ayer, por el candidato socialista. López Aguilar habló más del pasado que del presente, al que ni siquiera aludió, tal vez por saber que no significa nada bueno para él ni para su partido. En Europa, menos que en ningún otro sitio. Y estas son unas elecciones europeas, aunque no lo parezcan.
Las encuestas nos dirán quién ha ganado, aunque no hay que hacerles mucho caso dado lo manipuladas que están. Lo importante es saber si España sigue siendo «el país de sus antepasados», como la definió Kant, o sea, si su última guerra civil continúa, o si es el país de sus hijos, de los que últimamente no se ocupa demasiado.

Los caras


Por eso a López Aguilar la cara le llega desde aquí a la cornisa cantábrica. Como advertirían en el debate con Su Serenidad Don Jaime Mayor Oreja, en esa cara están trasplantado todos los caras: el cara de Pepiño Blanco, el cara de Caldera, el cara de Rubalcaba o el cara de Caamaño, el que dijo que lo mejor que puede hacer un delincuente es mentir y volver loca a la Policía y a la Justicia. Por no decir el cara de Chaves, que como saben era hasta ahora la cara del escudo del Barcelona, pero que se ha descubierto que no es «la» cara, sino «el» cara: el cara que antes de dar la espantá como presidente de la Junta de Andalucía le dejó una subvención de 10 millones de euros a la empresita de su niña de él, ¿será por cara?
Son unos artistas de la cara. ¿Sabe usted cómo se acaba con los 4 millones de parados? ¿No oyó lo que dijo la cara del cara de López Aguilar? Pues se acaba, apunta, nene, con la sostenibilidad de las energías alternativas de la innovación del modelo productivo del I+D para luchar contra el cambio climático con ordenadores progres, no con ladrillos fachas. Lo dicen y se quedan tan panchos. Y tienen tanta cara, que logran que el personal se lo crea, y que se convenza de que si hay 4 millones de parados es por culpa de Bush, de Aznar, de la derecha y de Su Santidad el Papa.

¿Lo igual sólo se dice de lo distinto?.


Cierta Universidad planea implantar una titulación universitaria «en igualdad».

Si es igualdad formal, ya existe: se llama Facultad de Matemática.

Si va de igualdad jurídica, Facutad de Derecho.

Si se refiere a igualdad material..., se llama ignorancia; que es lo único que iguala a los humanos.
¡Pobre Platón, que daba como suelo firme de la filosofía el principio sobre el cual se construye la lógica del lenguaje: lo igual sólo se dice de lo distinto!

Tentación reiterada


Resulta chocante la tentación que nuestros líderes padecen, tanto más cuanto mayor sea su radicalidad en la izquierda, por sobrevolar nuestras cabezas y vernos desde arriba.
Quizá para entendernos como buenas y laboriosas hormigas, incapaces de rebelarse contra lo establecido y siempre obedientes al instinto y las costumbres.

Sin discurso... Tópicos...



La falta de discurso en el PSOE es la causa de su evidente nerviosismo ante los resultados del 7 de junio. Los datos económicos no acompañan al Gobierno en sus ataques al PP, tampoco termina de cuajar entre los electores la acusación contra la derecha por la «codicia y el mercado» -que le ha sido tan rentable al Gobierno socialista hasta ahora- y la teoría de los «brotes verdes» no ha superado la prueba del realismo. Las previsiones para este año y el que viene mantienen a España en el liderato del desempleo y, puestos a hablar de Europa, harán que la tasa de paro bajo el Gobierno de Zapatero siga doblando la media de los países de la UE.
El PSOE emplea en sus críticas al PP un doble lenguaje, porque le reprocha que no hable de Europa al mismo tiempo que dedica sus vídeos de propaganda a temas tan de escasa actualidad europea como Aznar, Bush o Irak, pero además lo hace de forma incongruente. Si Rodríguez Zapatero quiere ser coherente con estas críticas al PP, debería empezar por retirar su apoyo al presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, anfitrión de la «foto de las Azores», o al nuevo secretario general de la OTAN, Andres Fogh Rasmussen, quien como primer ministro de Dinamarca desplegó tropas de combate en suelo iraquí, integradas en la coalición liderada por Estados Unidos.

Acusa... que siempre algo queda.


Tercer espaldarazo judicial a José Manuel Soria en Canarias. El líder del PP isleño sale otra vez reforzado tras conocerse el archivo definitivo del recurso contra el auto de hace dos semanas, en el que no se admitía la denuncia de un periodista por supuesta información privilegiada de Soria cuando presidía el Cabildo de Gran Canaria, en torno a un concurso eólico, investigado actualmente por la Justicia.
Según el TSJ de Canarias, los argumentos de la denuncia no tienen "fundamentación alguna". Según señala la Sala, el uso de información privilegiada por parte de los demandados en torno a la futura adjudicación de parques éólicos en Canarias -concurso anulado por el Gobierno precisamente a raiz de la instrucción judicial del caso- "resulta harto impreciso y por tanto carente de un contenido".
La resolución judicial se basa precisamente en esa investigación judicial. Así, el texto de la desestimación del recurso expone que "no existe elemento que permita suponer que hubo limitación alguna en una amplia investigación como lo fue en el coloquialmente llamado caso Eólico".
La resolución, firme y contra la que no cabe recurso alguno, se suma a otros dos fallos judiciales conocidos en las últimas dos semanas, que resultaron favorables a Soria y que despejaron dudas sobre las denuncias en los llamados "caso chalet" y "caso salmón".

sábado, 23 de mayo de 2009

Que viene el lobo


Apelar al miedo es uno de los recursos más habituales en las campañas electorales modernas.
En la videopolítica actual, en la que el lenguaje audiovisual es la clave para transmitir los mensajes de los partidos, la negatividad de los contenidos es una de sus señas de identidad.
Al lanzar un spot se busca el objetivo de generar cobertura en los medios, para conseguir que haya debate en torno a él y su impacto sea mayor. Por ello, la polémica, el conflicto y la provocación, que son ingredientes habituales en los medios de comunicación, marcan el estilo de muchas de estas piezas audiovisuales. Puede que su efectividad a corto plazo se consiga, pero el abuso de las campañas negativas es directamente proporcional al nivel de desconfianza de los ciudadanos por la política.
Vídeo va, miedo viene. Con un minuto por cabeza en cada telediario y unas grabaciones impactantes en Youtube, los partidos ya nos han metido en una campaña electoral que nos llevará a votar, o a quedarnos el domingo 7 de junio en casa, únicamente en base a dos factores: las imágenes que se nos ofrezcan estas dos semanas y el tipo de miedo que éstas nos hagan sentir.
Todo lo demás es ganas de perder tiempo y dinero. Lo único que importa son las imágenes. Y las imágenes están trucadas. Son los grandes partidos quienes graban sus mítines y envían las imágenes a todos los canales de televisión, de modo que sólo veremos a Zapatero y a Rajoy desde sus mejores ángulos y a masas enfervorizadas agitando banderas rojas o azules. Sus frases, ajustadas al milímetro, conforme se enciende la luz roja incrustada en el atril que les avisa de que han entrado en directo. Y sus vídeos, muy bien elaborados para impactar. A quien más miedo le de que venga la derecha, que vote al PSOE. Quien tenga terror a la crisis, que lo haga por el PP. Para eso, para dar miedo, están las imágenes.

lunes, 18 de mayo de 2009

¿Conspiranoia?


Los 'convidados de piedra' de los análisis del 11-M (Editorial de El Mundo)
LA ENTREVISTA que hoy publicamos con Antonio Iglesias, uno de los ocho expertos que participaron en la prueba pericial sobre explosivos ordenada por el tribunal del 11-M, es demoledora para la sentencia de la Audiencia Nacional refrendada por el Supremo. Los datos que este químico pone sobre la mesa indican que fue dictada sobre bases falsas y condicionada por una más que probable manipulación de la investigación.
Iglesias es contundente al afirmar que en las muestras recogidas en la estación de El Pozo «aparece el retrato robot del Titadyn». La sentencia da por hecho, en cambio, que estalló Goma 2 ECO basándose en el dibutilftalato presente en los análisis. Sin embargo, en contra de lo que afirma el texto de Gómez Bemúdez, este elemento no sirve como «diferenciador». De hecho, estaba en el Titadyn incautado a ETA en Cañaveras días antes de la masacre. Durante la pericial del 11-M se detectó su presencia, pero se camufló entonces bajo el nombre genérico de «ftalatos», por lo que al tribunal le pasó desapercibido un dato que podría haber cambiado la sentencia, al menos en lo que se refiere al papel de Trashorras y la trama asturiana. ¿Casualidad o manipulación? Es ahora cuando Iglesias ha comprobado que la referencia a los ftalatos escondía el dibutilftalato.
En contra de la tesis de que lo que estalló en los trenes fue Goma 2 ECO está el hecho incontrovertible de que en la estación de El Pozo apareció DNT, que no forma parte de ese explosivo. Iglesias lo presenta como un inesperado «convidado de piedra». Es muy revelador, a ese respecto, el episodio en el que narra la reacción airada del jefe de la pericia del 11-M, Alfonso Vega, contra los Tedax, cuando constata la presencia de DNT en los análisis. Su enfado se debió, probablemente, a que en ese instante cayó en la cuenta de que la Policía Científica había sido engañada por una unidad (los Tedax) a la que no correspondía el análisis de los explosivos.
Curiosamente, días después, en las instalaciones donde se custodiaban las pruebas, se produjo el apagón que desconectó las cámaras que garantizaban que nadie pudiera manipularlas. Y fue a partir de ese momento cuando comenzaron a aparecer trazas de DNT en las muestras de Goma 2 ECO que alimentaron la teoría de la contaminación, pese a que ninguno de los análisis anteriores las habían detectado. De nuevo, ¿casualidad o manipulación?
La reacción de desconcierto de Vega ante la aparición del DNT es parecida a la que manifestó cuando se conoció la presencia de otro «convidado de piedra» -la nitroglicerina- en los restos de polvo de extintor. Y es que la nitroglicerina tampoco forma parte de la Goma 2 ECO.
Los análisis de Iglesias llegan a otra elocuente conclusión. Merced a un estudio de granulometría, advierte que es «estadísticamente imposible» que la muestra patrón de dinamita que el jefe de los Tedax ofreció a la Policía Científica proviniera de un cartucho distinto a aquel al que pertenecían los restos de explosivo que los agentes decían haber encontrado en la furgoneta Kangoo supuestamente utilizada por los islamistas. Eso apunta a la fabricación de una prueba falsa. Pero además, en todos los análisis de las dos muestras aparece lo que Iglesias presenta como un tercer «incómodo convidado de piedra»: metenamina, un compuesto que tampoco forma parte de la Goma 2 ECO y que, por lo tanto, no debía estar en ninguna de ambas.
Iglesias, que en sus explicaciones demuestra que el rigor científico no está reñido con la exposición didáctica, nos presenta así un documento esencial, de primera magnitud, que confirma las sospechas de manipulación no sólo durante la instrucción del 11-M, sino también durante la pericia ordenada por el tribunal. Esos «convidados de piedra», como en el Tenorio, parecen querer volver del pasado para recordar a los vivos que la justicia sigue siendo una asignatura pendiente. Su informe será publicado próximamente por La Esfera de los Libros para que cualquier ciudadano pueda consultarlo.

sábado, 16 de mayo de 2009

Una mentira repetida mil veces


LA consigna goebbelsiana («Una mentira repetida mil veces se convierte en una verdad») ha sido adoptada por el gobierno socialista como justificación del aborto libre, convenientemente arropada con la coartada emotiva.
Y así, mediante la repetición de una consigna falaz y el recurso al aspaviento emotivo, la pobre gente arrasada por el napalm de la propaganda es capaz de comulgar con ruedas de molino.
Nos repiten como papagayos los promotores del aborto libre que su propósito no es otro que garantizar la seguridad jurídica de la mujer, evitando su «criminalización». Poco importa que la tozuda realidad nos demuestre que ninguna mujer ha sido «criminalizada» en los últimos veinticinco años por abortar; poco importa que nuestro ordenamiento jurídico establezca todas las garantías jurídicas y procesales exigibles por seguridad jurídica: presunción de inocencia, tutela judicial efectiva, asistencia de letrado, etcétera. El gobierno ha decidido que una mentira repetida mil veces terminará convirtiéndose en verdad; y sabe que el napalm de la propaganda acabará con esa nefasta manía de pensar a la que todavía se aferran algunos recalcitrantes.
Y el napalm de la propaganda pretende que a la impunidad, a la connivencia de la ley con el delito, se le llame «seguridad jurídica».

A esto se le llama nominalismo radical: se niega la posibilidad de conocer la naturaleza de las cosas; y el nombre que les damos a las cosas sustituye su verdadera naturaleza, de tal modo que cuando cambiamos su nombre, tal cosa simplemente deja de existir.
Así, a la impunidad se le denomina caprichosamente «seguridad jurídica»; y a un delito como el aborto se le llama «derecho». Desde el momento en que se niega la capacidad humana para establecer la naturaleza de las cosas, ya no hay una racionalidad ética que pueda definir objetivamente los derechos humanos. Y así, un delito puede convertirse caprichosamente en «derecho», mediante un mero proceso político.
El poder, en fin, se convierte en «creador» de derechos, con la coartada de atender la satisfacción de necesidades, apetencias y anhelos de una sedicente mayoría.
De este proceso, característicamente totalitario, queda excluida la posibilidad del debate, puesto que se niega la esencia misma del concepto de derecho como algo inherente a la propia naturaleza humana, para instaurar un nuevo concepto de «derecho» como producto de una coyuntural voluntad política.

De este modo, lo que era algo inscrito en la propia naturaleza humana, pude ser modificado, redefinido, incluso subvertido en su misma esencia (esto es, desnaturalizado) por pura conveniencia.
Y lo que era -según se recoge en el preámbulo de la Declaración de Derechos Humanos-«modelo común para todos los seres humanos», válido en cualquier circunstancia y cultura, se convierte en un barrizal nominalista, modelable según la pura conveniencia. Todo ello, por supuesto, bien rebozadito de emotividad.
Por desistimiento acomodaticio o mera pereza para razonar éticamente, no faltan los tontos útiles que aseguran que esta conversión del aborto, mediante la utilización de la consigna goebbelsiana, en «derecho» que otorga «seguridad jurídica» a la mujer no es sino una «cortina de humo» que pretende ocultar los descalabros de la crisis económica. Cuando de lo que en realidad se trata es de la culminación de un proceso de ingeniería social que busca lo que C. S. Lewis llamaba «abolición del hombre».

«El sentido del bien y del mal, de lo justo y de lo injusto -escribe Aristóteles en su Política-, es el rasgo exclusivo del hombre». Y lo que esta nueva ley del aborto anhela, pura y simplemente, es que nos despojemos de nuestra racionalidad ética; en definitiva, que dejemos de ser humanos, para aceptar como verdad una mentira repetida mil veces.
www.juanmanueldeprada.com

Felipe González pide "responsabilidades políticas" al PP




El ex presidente Felipe González, cuyos gobiernos protagonizaron los mayores escándalos de corrupción de la democracia, se refirió este viernes al caso Gürtel para preguntarse "hasta cuándo se van a resistir los dobles raseros" del PP.
(Europa Press) González recordó en particular que el entonces líder de la oposición en Castilla y León y posteriormente presidente del Gobierno, José María Aznar, le dijo a Demetrio Madrid que aquella imputación era "incompatible con el cargo" y que tenía "24 horas para dimitir". Madrid fue procesado por un asunto laboral en una empresa de su propiedad y dimitió de su cargo en 1986, si bien en 1989 fue absuelto de todos los cargos que se le imputaban.
"La imputación no tenía nada que ver con su trabajo como presidente; para colmo él, que tenía conciencia clara de su inocencia, obviamente fue absuelto", subrayó hoy González, quien acto seguido y en alusión implícita a la reciente imputación del presidente de la Generalitat valenciana, el 'popular' Francisco Camps, se preguntó hasta cuándo "se van a resistir los dobles raseros"
"Hasta cuándo vamos a soportar unos y otros que cuando nos afecta un problema a uno de nosotros lo ve con una óptica y cuando afecta a uno de los adversarios lo ve con una óptica completamente distinta", expuso González en unos comentarios previos que hizo justo antes de pronunciar una conferencia sobre 'Energía y crisis', en el marco de unas jornadas organizadas por Aeefor y la Asamblea de Extremadura.
"Forma parte de algo la credibilidad o la falta de credibilidad de la función pública", apostilló González, quien lamentó, en alusión nuevamente al PP, que se tengan "unos criterios para unas responsabilidades políticas y otro criterio totalmente distinto para las responsabilidades políticas de los demás". "Unos tienen un comportamiento y otros tienen otro comportamiento, cada uno ya después que analice qué compatibilidades hay desde el punto de vista ético", apuntó el ex presidente del Gobierno.

*.- Éstos son los casos más relevantes:

- Juan José Ibarretxe, lehendakari entre 1999 y 2009, declaró como imputado en enero de 2007 por haberse reunido en abril del año anterior con representantes de Batasuna. En esta misma causa también fueron imputados el actual lehendakari, Patxi López, y el actual Consejero de Interior del Gobierno vasco, Rodolfo Ares.

- Jaime Ignacio del Burgo (UCD), presidente de la Diputación Foral de Navarra, fue acusado el 23 de febrero de 1980 por malversación de fondos, causa por al que la diputación le destituyó del cargo, y en enero de 1984 fue exculpado por los tribunales.

- Demetrio Madrid (PSOE), presidente de la Junta de Castilla y León entre 1983 y el 29 de octubre de 1986, fue imputado por una querella presentada por once trabajadoras de la empresa textil de la que era propietario. En 1990 el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León le absolvió.

- Carlos Collado (PSOE), presidente de Murcia de 1984 a 1993, dimitió por supuestas irregularidades de fondos públicos por el "caso Casa Grande", del que finalmente fue absuelto por el Tribunal de Cuentas en 1997.

- Gabriel Cañellas (PP), presidente de Baleares, que dimitió en julio de 1995, a los pocos días de jurar su cargo, por los casos Calvia, fue imputado de cohecho por el supuesto cobro de comisiones en la concesión de infraestructura pública, y del Túnel de Sóller, sobre un supuesto delito de prevaricación en la adjudicación de obras. En 1997 fue absuelto de ambos delitos.

- Javier Otano (PSOE), presidente de Navarra en 1996, dimitió tras ser imputado en julio por un supuesto cohecho en la trama navarra del "caso Roldán". También declaró como imputado el 3 de octubre de ese año por el "caso Otano", que se cerró sin sentencia porque el delito había prescrito.

- Gabriel Urralburu, presidente de Navarra entre 1984 y 1991, fue encarcelado en 1995, por haber cobrado comisiones ilegales en obras públicas durante su mandato, el llamado "caso Otano". Urralbu, primer presidente regional encarcelado, salió en libertad provisional en 1998, y fue condenado a 11 años de prisión por el mismo delito y otros dos contra la Hacienda Foral y al pago de una multa de 4,69 millones de euros. En 2001, el Supremo redujo su condena a cuatro años, si bien mantuvo los 9 años inhabilitación y la multa.

- José Marco (PSOE), presidente de Aragón entre 1993 y 1995, dimitió y fue condenado a 13 meses de cárcel y 6 de inhabilitación por malversación de caudales y falsedad en documento público en el denominado "caso del Sillón". En 1998, fue condenado por el "caso de los Espías" a 9 meses de prisión, 2 de inhabilitación y a devolver 90.000 euros. No ingresó en prisión por un cambio en el Código Penal.

- Juan Hormaechea, presidente de Cantabria entre 1987 y 1995, fue condenado en 1994 a 6 años de prisión y 7 años de inhabilitación absoluta por un delito de malversación de caudales públicos. Tras varios recursos, el Tribunal Supremo confirmó en 2004 la condena de 3 años de cárcel y 13 de inhabilitación.

Mentiras desiguales


ANA MARIN PEREZ (Asociación de Mujeres en Igualdad), Tribuna Libre en el Diario de Teruel.

*.- Las mentiras que están llenando nuestra sociedad son cada día más numerosas, y por lo tanto, cada día más peligrosas.
*.- Nos están inundando de mentiras, y están calando como realidades, lo que las convierte en mentiras arriesgadas, y en gran medida, trágicas.
*.- Pero cuando estas mentiras afectan a la mujer, más de la mitad de la sociedad es la perjudicada;
y me explico:
*.- desde el PSOE se nos vendió el papel fundamental, único e incalculable que dicho partido jugaba en defensa de la mujer.
*.- Creó el Ministerio de Igualdad, Ministerio a todas luces inútil, incompetente, superfluo y dañino para los intereses de las mujeres, en la gran mayoría de las ocasiones.
*.- Nos vendió la creación de Juzgados de Violencia de Género: otra mentira; en 2007 se crearon 43 Juzgados exclusivos de Violencia de Género; en 2008, 11; el resto fueron competencias añadidas a los Juzgados de Primera Instancia e Instrucción, lo que conllevó que estos órganos jurisdiccionales, ya de por sí normalmente colapsados por el gran volumen de trabajo al que se enfrentan, se vieran “ahogados” por las nuevas competencias atribuidas.
*.- Por no mencionar que la Ley de Violencia de Género ha resultado (y a los hechos me remito) francamente insuficiente e insatisfactoria.
*.-Y para rematar su juego, vendió a los cuatro vientos (y a los ocho, y a los doce) una “ley de cuotas” para que en las listas electorales hubiera un número igual de hombres que de mujeres.
Otra mentira: en el Parlamento Europeo en 1994, el porcentaje de mujeres representantes de nuestro país era del 32,8%;
en 1999 del 34,4%;
con la llegada del PSOE, en 2004, el porcentaje descendió hasta el 25,9%.
Los mismos datos se podrían trasladar al Congreso de los Diputados y al Senado, donde el número de representantes femeninas del Grupo Parlamentario socialista ha descendido notablemente de la pasada legislatura al periodo actual.
Y tachó al Partido Popular de no sé cuantas cosas, sólo porque desde las filas de este partido político se defendió, con gran criterio, que el número de hombres o mujeres que llevaran las listas electorales de cada partido no importaba; lo realmente importante era la preparación de los futuros representantes de los ciudadanos para ejercer correctamente las funciones por estos encomendadas.
*.- Francamente, que en nuestra sociedad la mentira se haya convertido en una realidad con la que diariamente convivimos es muy triste; pero que se utilice a la mujer para el juego sucio de un partido político, y para crear unas expectativas falsas de futuro e igualdad entre nosotras, lo es mucho más.

domingo, 10 de mayo de 2009

Amigos y enemigos


Aunque todavía mantengan las formas y le guarden luto durante una temporada, la salida de Ibarretxe de la vida política vasca ha supuesto todo un alivio para la dirección de su partido. Ninguno de los actuales responsables del PNV niega hoy en privado que el plan soberanista ha supuesto para ellos un lastre político del que, internamente, ya se habían deshecho hace años. «A efectos del partido, el Plan se acabó en 2004», confiesa un miembro del EBB, «y desde entonces ya no lo llevamos bajo el brazo».
Lo que el PNV va a intentar es colocar al Partido Socialista contra las cuerdas en todas las materias que ellos consideran sensibles y políticamente rentables. Contando, eso sí, con la inestimable ayuda del PP, del que los nacionalistas esperan grandes servicios.
El razonamiento que alienta la esperanza del PNV es el siguiente: el verdadero adversario político del PP es el socialismo, no el nacionalismo. La base de los votantes populares es mucho más fronteriza con los socialistas que con el PNV. Por lo tanto, llegará un momento en que intentará disputarle los votos, sacándole fuera de la centralidad política del país que antes ocupaba el PNV y ahora pretende ocupar el PSE. Exactamente esa misma estrategia de acoso disfrazada de ofrecimiento de ayuda es la que los nacionalistas piensan poner en práctica, pero ellos lo harán «desde el primer día». Lo cual significa que empujarán a los socialistas a que se definan cuanto antes en asuntos como la lengua y la educación. «Tanto el PP como nosotros le vamos a meter el dedo en el ojo con este tema de los modelos lingüísticos», explica un responsable del PNV, que asegura que, en ese caso, el PSE sólo tendrá dos salidas: o acercarse a las tesis de los populares -«ojo con el fantasma del monolingüismo», dicen- o refugiarse bajo el manto del PNV. Y ahí es donde los burukides le estarán esperando.
Los del PNV, no tienen ninguna duda.
Naturalmente, los burukides no son tontos y, aunque ahora estén contándose a sí mismos el cuento de la lechera, saben que la idea de que Patxi López vaya a hacerles sitio en el poder es disparatada.
El PP sabe bien que cualquier exceso por su parte que ponga en peligro al nuevo Gobierno supondrá su propio fracaso como aliado y su desaparición de la escena política en el futuro. Así que no le meterá el dedo en el ojo a Patxi López. No hará lo que el PNV espera, no será su aliado involuntario. 

sábado, 2 de mayo de 2009

Trabajadores y bla, bla, bla


SEÑOR presidente del Gobierno, señora Pajín, señores sindicalistas, no está el horno para demagogia de ésa que ustedes derrochan.¡De verdad! Llevamos décadas oyendo las mismas consignas trasnochadas, que en época de vacas gordas aún tienen un pase, pero que con la que está cayendo no se aguantan. Basta ya de bla,bla,bla y apúntense a las fórmulas de eficacia contrastada, inventen alguna que funcione, o dejen el sitio a otros.
Cada año la misma monserga: Que si «estamos con los trabajadores», que si «nos sentimos muy cerca de ellos», que si «el PSOE va a liderar una nueva dirección de Europa en la que se ponga a la gente y a los trabajadores como prioridad», que si «por la justicia y la dignidad laboral», que si «contra la crisis, por el empleo» y venga eslóganes y pancartas, mientras 8.000 nuevos españoles se suman cada día al paro. ¡Menos predicar y más dar trigo, que estamos hartos!
Hasta la fecha, y mientras no se demuestre lo contrario, únicamente dos son las fuentes de las que mana el empleo. Corrijo; tres, aunque sólo dos son autosuficientes: la gran empresa, la empresa mediana o individual, y la ubre gigantesca del Estado, que, en sus múltiples manifestaciones, da de comer a un número creciente de funcionarios, asesores (una especie en expansión tan veloz como el virus de la gripe porcina), políticos, liberados sindicales, correveidiles, portamaletines y aduladores varios, cuyos emolumentos proceden de los impuestos que pagamos implacablemente todos: quienes tenemos el privilegio de seguir trabajando y quienes se han sumado ya, muy a su pesar, al club de los lunes al sol.
Prescindiendo de la tercera modalidad, que se alimenta de las dos primeras y, por tanto, depende de ellas para sobrevivir, la producción de ese artículo de lujo en el que se ha convertido el trabajo es una actividad que desarrollan en exclusiva compartida empresarios y autónomos, que son quienes saben hacerlo. Los primeros llevan meses pidiendo en vano al Ejecutivo que promueva una reforma laboral que flexibilice el mercado, mientras los segundos suplican que se alivie la carga fiscal que soportan y que les está asfixiando.¿Qué responde Zapatero? Que la culpa de la crisis es de Bush y que lo peor ya ha pasado. ¿Qué hacen los sindicatos? Subirse a la máquina del tiempo y regresar a la lucha de clases entre explotadores y explotados que tan bien retrató Zola hace unos 150 años. ¿Cómo actúa el PSOE desde el poder? Secundando manifestaciones y lanzando proclamas vacías. ¿Y para eso les pagamos?.
Isabel San Sebastian, El Mundo.

Codiciosos


PÚBLICO
El ministro de Fomento y número dos del PSOE, José Blanco, advirtió al líder del Partido Popular, Mariano Rajoy, que su "codicia" por querer llegar al Gobierno a costa de los desempleados "le pasará factura en las próximas elecciones generales".
Y es que Blanco considera que el "objetivo" de Rajoy es que la Encuesta de Población Activa le lleve al poder.
"El presidente del PP quiere llegar a la Moncloa a costa del sufrimiento de la gente que pierde su empleo", lamentó en declaraciones a Europa Press.
Durante el acto de celebración del primero de mayo en el que participó en su Galicia natal, el ministro de Fomento tachó de "receta insolidaria" el conjunto de medidas presentadas por los conservadores para hacer frente a la crisis y al desempleo. En su opinión, las dificultades económicas "no son sólo la consecuencia de un hecho concreto", sino la muestra de que "ha entrado en crisis un modelo político". "El de los valores de la derecha", sentenció.
En este sentido, Blanco sostuvo que al PSOE "no le sirven las recetas oficiales y no oficiales de la derecha", sino que lo que necesita el Ejecutivo de Zapatero es la máxima colaboración del principal partido de la oposición. "No nos sirven propuestas que apuesten por que ganen mucho unos pocos en detrimento de todos", apuntó .
El número dos de los socialistas se refería, en concreto, a la propuesta del PP para reducir el gasto público. Según advirtió, si se reducen las prestaciones de las administraciones públicas, se produciría un "recorte de los derechos de los trabajadores". Por eso, Blanco consideró que el planteamiento de los conservadores "sólo es una receta para que cuando vuelva el crecimiento económico volvamos a una economía desregulada, a la especulación inmobiliaria y a la explotación del medio ambiente".

La mentira como método


EDURNE URIARTE
La mentira como método de gobierno ha sido una constante de Zapatero desde que llegó al poder.
La novedad ahora, con la mentira aplicada a la situación económica, es la irritación que está provocando por primera vez entre los suyos.
Antes, a lo mismo lo llamaban optimismo, y pensamiento mágico, los críticos más bondadosos. Los demás lo llamábamos simplemente mentira, con un éxito más bien limitado, puesto que el pensamiento mágico atribuido al líder acabó atrapando a unos y otros. Y llegaron a convencerse de que se trataba de la ingenuidad de un idealista y de que el idealista tenía, además, una varita para convertir sus deseos en realidad.
Poco importó que hubiera todo tipo de evidencias de sus mentiras sobre ETA y la auténtica realidad de la negociación.
Tampoco el constante engaño de unos y otros en el debate autonómico.
La preocupación de los seguidores de Zapatero sólo comienza a ser significativa ahora, cuando le escuchan asegurar que ya hemos pasado lo peor de la crisis económica y que ve signos de recuperación allí donde los datos, los expertos y todos los líderes internacionales reconocen una profundización de la crisis. Ha sido la última de sus boutades, y van muchas desde que comenzó negando la crisis.
Los suyos aventuran que pudiera tratarse de una estrategia calculada para contener el descontento hasta que el inicio de la recuperación llegue de verdad, antes de 2012 con un poco de suerte. Pero, si así fuera, se asombran de la torpeza de su líder, cuando el reconocimiento de los hechos sería política y electoralmente mucho más eficaz. Se acabaron el optimismo, el idealismo y el pensamiento mágico. Desapareció la flor en el culo. Ni siquiera está claro aquello de que «pero gana elecciones», que diría Sarkozy. Para los cercanos, queda la torpeza. Y para los demás, lo de siempre, la mentira como estilo de poder.

¿En qué se fundamentan los "Derechos Humanos"?.


Ojeando la prensa me encuentro con esta cita que hace un lector en la Sección de Opinión.

"El Papa, en una carta reciente a los obispos transida de dolor, constataba que «la fe está en peligro de apagarse como una llama que no encuentra ya su alimento»;
y añadía:
 «El auténtico problema en este momento actual de la historia es que Dios desaparece del horizonte de los hombres y, con el apagarse de la luz que proviene de Dios, la humanidad se ve afectada por la falta de orientación, cuyos efectos destructivos se ponen cada vez más de manifiesto»".

¿Es cierto que "la humanidad se ve afectada por la falta de orientación, cuyos efectos destructivos se ponen cada más de manifiesto"?.
De ser cierto: ¿A qué se debe y cual es elmotivo de tal deriva?.
Por lo menos es interesante plantearse esta cuestión,  aunque no se tenga respuesta para ella.


«Los Picapiedra»






M. MARTÍN FERRAND
Todos cuantos somos trabajadores sustentamos tan dinámica y productiva (?) situación en la condición previa y fundamental de ciudadanos. De ahí que en algunos momentos, como cuando se celebra el Primero de Mayo, algunos sintamos la incomodidad de que las reivindicaciones de quienes dicen representarnos en tanto que trabajadores suelen atentar contra nuestro derechos cívicos.
El sindicalismo español actual, hijo directo del verticalismo franquista, se ha quedado tan viejo y anacrónico que sus líderes fundamentales, como los secretarios generales de CC.OO. y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, tienden a evocar -dicho sea con ternura y cariño- a los protagonistas de Los Picapiedra, una de las series de más éxito emitidas por TVE.
Toxo y Méndez, o viceversa, descendieron ayer de sus respectivos troncomóviles, adquiridos y mantenidos con cargo al Presupuesto, como los de la CEOE, para, en alarde de anacronismo ideológico y verbal, reclamar los cambios «trascendentales y urgentes» que, según ellos, pueden remediar el difícil momento por el que atravesamos: «Frente a la crisis: empleo, inversión pública y protección social».
Suena bien; pero, ¿qué quiere decir eso? La palabrería hueca, los eslóganes acuñados por su eufonía antes que por su significado, forman parte de una liturgia que ya no tiene lugar cuando nadie discute los supuestos básicos del Estado de bienestar.
En una democracia, aunque lo sea, como la nuestra, sin la separación fáctica de los poderes del Estado, los derechos del ciudadano tienen más enjundia y muchísima más fuerza que los del trabajador.
De ahí que la latente propensión sindical a contraponer sus organizaciones con la representatividad del Parlamento sea una patología que convendría remediar. Será difícil porque hasta María Teresa Fernández de la Vega, que no pierde oportunidad para evidenciar su populismo de raíz peronista y en renuncia a la mitad de su responsabilidad, es capaz de decir que el Gobierno, que se suma «de corazón» a la celebración del Primero de Mayo, estará siempre al lado de los trabajadores.
¿Y los demás? Lo suyo, que es lo que le entra en el empleo, debieran ser los ciudadanos -empleadores, empleados, infantes, amas de casa... -; pero la claridad en las ideas y la asunción de responsabilidades no son notas dominantes en el PSOE según lo entiende y desvirtúa José Luis Rodríguez Zapatero.

viernes, 1 de mayo de 2009

Primero de mayo

¿ Unidad sindical?


El caudillo sonriente


Tras la sonrisa del presidente nada hay: no hay bandera, no hay puño, no hay rosa, no hay libros. Sólo una sonrisa. Se trata de la reducción del socialismo del PSOE a una mueca, del vaciamiento ideológico de la primera organización política nacional, de la banalización radical de la acción política y, en definitiva, de una forma sutil y patológica de nuevo culto a la personalidad del líder.
La letra Z desnuda la indigencia intelectual del presidente y, al mismo tiempo, denota la crisis de contenidos ideológicos de su partido. El jefe del Ejecutivo es el resultado -como dirigente político- de una constelación de casualidades históricas irrepetibles que su levedad formativa no ha sabido aprovechar.
Z resuelve los problemas -cree que lo hace- negando su existencia o su entidad.
Nada de lo que ocurre en España es particularmente grave o preocupante para el presidente del Gobierno.
El peligro para España y para el PSOE reside, precisamente, en la estrategia de la sonrisa porque no deja de ser una simple máscara para relativizar -y al mismo tiempo camuflar- la sin par incapacidad del Gobierno y de su presidente en la gestión de los asuntos públicos y de la renovación de su partido.
Se ha adueñado del socialismo español el síndrome paralizante de la sonrisa del presidente y nadie dice ni hace nada que pueda contradecir los nuevos códigos de comportamiento zapaterista.
Zygmunt Bauman, en su denostado «Vida líquida», describe a los nuevos especímenes públicos que se guían en sus apegos y compromisos por la «liviandad y la revocabilidad» de sus posiciones y, siguiendo a Jacques Attali, les imputa vivir «en una sociedad de valores volátiles, despreocupados ante el futuro, egoístas y hedonistas».
Para estos personajes, dice Bauman, «la novedad es una buena noticia, la precariedad es un valor, la inestabilidad es un imperativo, la hibridez es la riqueza». «Dominan y practican el arte de la vida líquida: la aceptación de la desorientación, la inmunidad al vértigo y la adaptación al mareo y la tolerancia a la ausencia de itinerario y de dirección y de lo indeterminado de la duración del viaje».
Perfila el estereotipo del novísimo irresponsable que se ha encaramado con éxito a las posiciones de poder en una sociedad -que es líquida porque ha desterrado los valores permanentes- sometida a simulaciones y engaños.
El inquilino de la Moncloa es, exactamente, lo que parece: una sonrisa con un fondo de nada.
El decurso de los acontecimientos va modelando un liderazgo virtual de carácter personalista, desideologizado, oportunista y charlatán en el que el socialismo se transforma en un activismo progresista contradictorio muchas veces con los valores de la izquierda y donde la gestión política muta en un ejercicio de ocultamiento, relativización o elusión de los problemas.

23 de Octubre de 2007.- José Antonio Zarzalejos.

En el Congreso de los Diputados


La primera derrota de los socialistas en un Pleno de esta legislatura, que tuvo lugar el pasado martes, podría tener un efecto colateral: acelerar la salida del Congreso de algún ex ministro. Porque entre los nueve diputados cuya ausencia hizo palpable la precariedad del PSOE están el ex titular de Sanidad, Bernat Soria, y el de Justicia, Mariano Fernández Bermejo. Sabido es que al menos el primero, como el ex vicepresidente Pedro Solbes, había manifestado su deseo de dejar el acta de parlamentario, pero el partido pidió a ambos que esperaran hasta septiembre. Sin embargo, después de lo ocurrido esta semana, el PSOE habría decidido primar la disciplina sobre la continuidad, y dar vía libre para marcharse a cuantos no estén dispuestos a cumplir con su deber parlamentario.Una de las jóvenes promesas más dispuestas a tomar el relevo es el concejal de Madrid Pedro Sánchez.

Iniciativa sectaria


SIEMPRE complaciente con dictadores que se proclaman de izquierdas, algunos sectores del «progresismo» español buscan en cambio cualquier pretexto para atacar a la Iglesia católica.
La Mesa del Congreso de los Diputados admitió a trámite recientemente una peregrina propuesta de IU-ICV para que la Cámara se pronuncie sobre una «reprobación» del Papa por sus palabras acerca del sida durante la visita a África.
Con un criterio aparentemente formalista, la mayoría consideró que las funciones del órgano de gobierno del Congreso excluyen el control del contenido de las iniciativas que presentan los grupos. Se trata de un criterio más que discutible porque, con este mismo argumento, tendría que admitirse el debate sobre propuestas manifiestamente contrarias a la Constitución o incluso ofensivas para las instituciones democráticas.
Por otra parte, existen precedentes que excluyen la discusión sobre cuestiones que afecten a jefes de Estado extranjeros o que alteren las relaciones diplomáticas entre España y otros sujetos del Derecho internacional, como es el caso de la Santa Sede. Desde este punto de vista, es muy lógico que monseñor Rouco -en su calidad de máximo representante de la Iglesia en nuestro país- haya trasladado su protesta y malestar a José Bono por este ataque injustificado a la persona del Papa y al derecho más elemental a la expresión de su mensaje espiritual. Dadas las circunstancias, el voto favorable de dos representantes del PP en la Mesa (Ana Pastor y Celia Villalobos), frente al rechazo de otros dos diputados de la oposición (Jorge Fernández e Ignacio Gil-Lázaro), demuestra una cierta ingenuidad puesto que el acuerdo contaba ya con mayoría suficiente y era fácil percibir la trampa política oculta bajo los criterios formalistas sobre la admisión a trámite. En todo caso, es absurdo alimentar una polémica artificial puesto que el Grupo Popular ha dicho ya con toda claridad que votará en contra de esta propuesta disparatada.
El Parlamento debe dedicar su tiempo y su esfuerzo a los asuntos que realmente preocupan a los ciudadanos, como la recesión, el paro, o el riesgo sanitario derivado de la gripe porcina. Es inaceptable que IU-ICV malgaste el tiempo de nuestros parlamentarios y el dinero de todos los españoles en lanzar un mensaje sectario sobre unas palabras del Papa evidentemente manipuladas y sacadas fuera de contexto. Las «proposiciones no de ley» son un instrumento de orientación política en virtud del cual la Cámara expresa su criterio sobre un asunto de su competencia. Por tanto, no deberían utilizarse al servicio de un interés partidista, con un ejercicio abusivo del derecho a presentar iniciativas. Si la Mesa del Congreso se limita a comprobar el cumplimiento de los requisitos burocráticos, su función resulta perfectamente inútil ya que podría ser realizada con mayor eficacia por un órgano técnico y administrativo. Por ello, es necesario que ejerza sus competencias como órgano directivo, en el marco de la Constitución del Reglamento parlamentario, para evitar que puedan pronunciarse en la sede de la soberanía nacional expresiones que ofenden al sentimiento mayoritario de los españoles. La sospecha de que el laicismo radical que inspira últimamente al Gobierno tenga algo que ver con esta iniciativa contribuye a que merezca ser rechazada de forma rotunda.

Hasta cuándo Garzón


EL juez Garzón ha provocado un nuevo espasmo en la justicia española al iniciar una investigación por supuestas torturas denunciadas por presos islamistas que estuvieron recluidos en Guantánamo. Es la réplica de Garzón a la oposición frontal que mostró el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, a la querella presentada contra los juristas estadounidenses que planificaron el régimen legal de Guantánamo, querella que Conde-Pumpido llegó a calificar de fraudulenta. Ahora, Garzón reaviva unas denuncias que conocía desde hace varios años y a las que no prestó atención, pero con las que pretende encumbrarse a la dirección de una causa general contra la administración Bush, evidente objetivo último de estas decisiones. Para empezar, Garzón ya ha reclamado al juez Moreno que le remita las diligencias por los «vuelos de la CIA», alegando la conexión con las supuestas torturas a presos islamistas.
Este tipo de actuaciones judiciales desacredita el principio de justicia universal porque acaba convirtiéndose en el zafarrancho de jueces oportunistas y de estrategias puramente ideológicas, que dejan al Estado, titular del poder jurisdiccional, en manos de iniciativas incontroladas. La regulación actual de la justicia universal en España es insostenible. Resulta inaplazable una reforma que condicione la incoación de estos procesos a la existencia de un interés directo del Estado español e incluso a una querella sólo del Ministerio Fiscal. Con la vigente Ley Orgánica del Poder Judicial, la Audiencia Nacional puede investigar cualquier delito contra la humanidad cometido en cualquier tiempo y lugar, pasando por encima de las relaciones diplomáticas, de la soberanía de los demás Estados y del respeto a la función jurisdiccional. Se sabe que ninguno de estos procesos es viable, por dificultades insalvables para obtener pruebas, recibir la colaboración del Estado donde se produjeron los delitos o sentar a los responsables en el banquillo, pero se promueven aun a pesar de este fracaso asegurado, engañando además a las víctimas con unas expectativas que no se van a cumplir. Ahora bien, a esta situación se ha llegado por causas concretas, entre otras, por el halago de la izquierda que hoy gobierna a esta forma justiciera y demagógica de hacer justicia, sobre todo cuando compromete a otros gobiernos o políticos conservadores. Lo procedente, y a la espera de que en algún momento ser un mal juez tenga consecuencias, es que la Fiscalía se oponga a este nuevo sumario de Garzón y que el Gobierno cambie la ley para resguardar el poder jurisdiccional del Estado frente a nuevas temeridades judiciales en el extranjero