El ex presidente Felipe González, cuyos gobiernos protagonizaron los mayores escándalos de corrupción de la democracia, se refirió este viernes al caso Gürtel para preguntarse "hasta cuándo se van a resistir los dobles raseros" del PP.
(Europa Press) González recordó en particular que el entonces líder de la oposición en Castilla y León y posteriormente presidente del Gobierno, José María Aznar, le dijo a Demetrio Madrid que aquella imputación era "incompatible con el cargo" y que tenía "24 horas para dimitir". Madrid fue procesado por un asunto laboral en una empresa de su propiedad y dimitió de su cargo en 1986, si bien en 1989 fue absuelto de todos los cargos que se le imputaban.
"La imputación no tenía nada que ver con su trabajo como presidente; para colmo él, que tenía conciencia clara de su inocencia, obviamente fue absuelto", subrayó hoy González, quien acto seguido y en alusión implícita a la reciente imputación del presidente de la Generalitat valenciana, el 'popular' Francisco Camps, se preguntó hasta cuándo "se van a resistir los dobles raseros"
"Hasta cuándo vamos a soportar unos y otros que cuando nos afecta un problema a uno de nosotros lo ve con una óptica y cuando afecta a uno de los adversarios lo ve con una óptica completamente distinta", expuso González en unos comentarios previos que hizo justo antes de pronunciar una conferencia sobre 'Energía y crisis', en el marco de unas jornadas organizadas por Aeefor y la Asamblea de Extremadura.
"Forma parte de algo la credibilidad o la falta de credibilidad de la función pública", apostilló González, quien lamentó, en alusión nuevamente al PP, que se tengan "unos criterios para unas responsabilidades políticas y otro criterio totalmente distinto para las responsabilidades políticas de los demás". "Unos tienen un comportamiento y otros tienen otro comportamiento, cada uno ya después que analice qué compatibilidades hay desde el punto de vista ético", apuntó el ex presidente del Gobierno.
*.- Éstos son los casos más relevantes:
(Europa Press) González recordó en particular que el entonces líder de la oposición en Castilla y León y posteriormente presidente del Gobierno, José María Aznar, le dijo a Demetrio Madrid que aquella imputación era "incompatible con el cargo" y que tenía "24 horas para dimitir". Madrid fue procesado por un asunto laboral en una empresa de su propiedad y dimitió de su cargo en 1986, si bien en 1989 fue absuelto de todos los cargos que se le imputaban.
"La imputación no tenía nada que ver con su trabajo como presidente; para colmo él, que tenía conciencia clara de su inocencia, obviamente fue absuelto", subrayó hoy González, quien acto seguido y en alusión implícita a la reciente imputación del presidente de la Generalitat valenciana, el 'popular' Francisco Camps, se preguntó hasta cuándo "se van a resistir los dobles raseros"
"Hasta cuándo vamos a soportar unos y otros que cuando nos afecta un problema a uno de nosotros lo ve con una óptica y cuando afecta a uno de los adversarios lo ve con una óptica completamente distinta", expuso González en unos comentarios previos que hizo justo antes de pronunciar una conferencia sobre 'Energía y crisis', en el marco de unas jornadas organizadas por Aeefor y la Asamblea de Extremadura.
"Forma parte de algo la credibilidad o la falta de credibilidad de la función pública", apostilló González, quien lamentó, en alusión nuevamente al PP, que se tengan "unos criterios para unas responsabilidades políticas y otro criterio totalmente distinto para las responsabilidades políticas de los demás". "Unos tienen un comportamiento y otros tienen otro comportamiento, cada uno ya después que analice qué compatibilidades hay desde el punto de vista ético", apuntó el ex presidente del Gobierno.
*.- Éstos son los casos más relevantes:
- Juan José Ibarretxe, lehendakari entre 1999 y 2009, declaró como imputado en enero de 2007 por haberse reunido en abril del año anterior con representantes de Batasuna. En esta misma causa también fueron imputados el actual lehendakari, Patxi López, y el actual Consejero de Interior del Gobierno vasco, Rodolfo Ares.
- Jaime Ignacio del Burgo (UCD), presidente de la Diputación Foral de Navarra, fue acusado el 23 de febrero de 1980 por malversación de fondos, causa por al que la diputación le destituyó del cargo, y en enero de 1984 fue exculpado por los tribunales.
- Demetrio Madrid (PSOE), presidente de la Junta de Castilla y León entre 1983 y el 29 de octubre de 1986, fue imputado por una querella presentada por once trabajadoras de la empresa textil de la que era propietario. En 1990 el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León le absolvió.
- Carlos Collado (PSOE), presidente de Murcia de 1984 a 1993, dimitió por supuestas irregularidades de fondos públicos por el "caso Casa Grande", del que finalmente fue absuelto por el Tribunal de Cuentas en 1997.
- Gabriel Cañellas (PP), presidente de Baleares, que dimitió en julio de 1995, a los pocos días de jurar su cargo, por los casos Calvia, fue imputado de cohecho por el supuesto cobro de comisiones en la concesión de infraestructura pública, y del Túnel de Sóller, sobre un supuesto delito de prevaricación en la adjudicación de obras. En 1997 fue absuelto de ambos delitos.
- Javier Otano (PSOE), presidente de Navarra en 1996, dimitió tras ser imputado en julio por un supuesto cohecho en la trama navarra del "caso Roldán". También declaró como imputado el 3 de octubre de ese año por el "caso Otano", que se cerró sin sentencia porque el delito había prescrito.
- Gabriel Urralburu, presidente de Navarra entre 1984 y 1991, fue encarcelado en 1995, por haber cobrado comisiones ilegales en obras públicas durante su mandato, el llamado "caso Otano". Urralbu, primer presidente regional encarcelado, salió en libertad provisional en 1998, y fue condenado a 11 años de prisión por el mismo delito y otros dos contra la Hacienda Foral y al pago de una multa de 4,69 millones de euros. En 2001, el Supremo redujo su condena a cuatro años, si bien mantuvo los 9 años inhabilitación y la multa.
- José Marco (PSOE), presidente de Aragón entre 1993 y 1995, dimitió y fue condenado a 13 meses de cárcel y 6 de inhabilitación por malversación de caudales y falsedad en documento público en el denominado "caso del Sillón". En 1998, fue condenado por el "caso de los Espías" a 9 meses de prisión, 2 de inhabilitación y a devolver 90.000 euros. No ingresó en prisión por un cambio en el Código Penal.
- Juan Hormaechea, presidente de Cantabria entre 1987 y 1995, fue condenado en 1994 a 6 años de prisión y 7 años de inhabilitación absoluta por un delito de malversación de caudales públicos. Tras varios recursos, el Tribunal Supremo confirmó en 2004 la condena de 3 años de cárcel y 13 de inhabilitación.
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